El Pontevedra cerró una temporada para olvidar logrando in extremis el objetivo final de la permanencia en la Segunda RFEF, la nueva cuarta categoría del fútbol nacional. El equipo granate goleó a un Oviedo B tocado por el repentino fallecimiento de su director deportivo, el exguardameta profesional Francesc Arnau, y que apenas generó peligro en un encuentro en el que también se jugaba la salvación. Los de Luisito acabaron terceros en la clasificación con solo cuatro puntos más que el peor tercero de la categoría, el Poblense, del grupo V, el único de este puesto que baja a Tercera RFEF.

Muchas aproximaciones pero pocas ocasiones claras tuvo el Pontevedra en la primera parte. Después de una llegada por banda izquierda del visitante Sandoval que acabó en córner, Rufo probó al portero Sarr con un disparo lejano que el meta visitante paró con el pecho, en un gesto con el que parecía que quería demostrar tranquilidad, pero que evidenció todo lo contrario. Solo cuatro minutos después, Rufo presionaba al cancerbero, que acababa regalando un córner.

La entrada al campo de Martín Diz dio otro aire a los locales e inició la jugada con la que se abriría el marcador. El canterano asistió a Jorge en banda derecha, que centró buscando a Rufo en el primer palo, pero el delantero no llega a tocar la pelota, que se envenena y se cuela por el segundo palo tras despistar a defensa y portero. Intentó reaccionar el cuadro carbayón moviendo banquillo, pero sería el Pontevedra el que golpearía de nuevo. Solo dos minutos después haría Álex González el definitivo 3-0. También inició la jugada Martín Diz, cuya asistencia dejó pasar Rufo con un bonito detalle de calidad.