Sufrir para volver a mandar

El Mos acabó con una racha sin ganar fuera. Sufrió pero cumplió en un campo pequeño, estrecho y con un rival aguerrido, agazapado esperando la contra. Y las abejas sumaron tres puntos valiosos. En su primer partido en la segunda fase tras empezar descansando esta liguilla impar de equipos, las de Telmo González recuperaron el liderato provisional (ahora empatadas a puntos con el Sárdoma, pero con un partido menos que las blanquiazules) y acabaron con diez semanas sin ganar fuera de As Baloutas, cuando en enero se impusieron al Valladares en A Gándara (0-4).

En esta oportunidad el triunfo se despejó en el segundo periodo. Tardó porque el Castro FC se encerró atrás. Había recibido cuatro tantos en As Relfas ante el Sárdoma y, en su cancha, buscó de nuevo el contraataque para sorprender.

Las mosenses, además, arrastran demasiadas bajas. Joana Montouto, su goleadora, ha recibido esta semana el alta médica, pero problemas laborales impidieron que se desplazara y, además, llegaría muy justa. Estará para el siguiente compromiso. Con Sara Alonso, un seguro defensivo, también fuera de la lista por cuestiones familiares y el KO de Xavi y María Calvar (ha recaído de su lesión de tobillo), el Mos tuvo que echar mano de la paciencia, del trabajo colectivo, para anotarse un valioso triunfo.

El choque fue eso, un choque sin pausa. En el segundo periodo, el conjunto local sentaba a Sandra, al recibir un golpe fortuito en la cabeza con una jugadora mosense. El Castro, pese a su posición en la tabla, colista, siguió peleando hasta el minuto final.

Valladares. El conjunto vigués tuvo el turno de descanso en este fin de semana. En la próxima jornada, las de Óscar Alonso reciben al Castro FC con opciones de escaparse del colista y de ganar ánimos. El Mos defenderá el liderato en casa frente al Oceja (coge a los rivales que va dejando el Sárdoma) y las viguesas reciben al filial sportinguista, quinto. El mano a mano entre amarillas y blanquiazules en esta segunda fase promete.