Cayó el Coruxo a pesar de su buen juego en el campo de un adversario enrachado, y que tuvo a David Álvarez, Davo, en su gran argumento para sujetar los tres puntos en casa frente a una escuadra gallega que no se dio nunca por vencida a pesar de las numerosas ausencias y del cansancio por el viaje intersemanal a Melilla. El Langreo conquistó un valioso triunfo ante un buen conjunto como el vigués, otro de sus rivales directos y suma su quinto encuentro sin perder que le sirve para alejarse un poco más de la zona de peligro.

El encuentro comenzó con bastante ritmo. Ambos equipos movían bien el esférico y buscando ambas bandas para acercarse a las porterías contrarias y ya en el primer minuto dispuso David Álvarez de una clara ocasión al plantarse sólo ante el meta Alberto, pero su disparo sería atajado por el meta con muchos apuros. Contestaría el Coruxo con un remate raso que obligaría al meta Adrián Torre a despejar en una apurada intervención.

Había mucho toque en la parcela central del conjunto gallego, pero el conjunto de Dani Mori llegaba una y otra vez sobre el área visitante y en una bonita jugada llevada por Mateo Arellano en el minuto 16 con servicio sobre Marc Nierga, éste de certero disparo lograba batir al meta Alberto que nada puede hacer para detener el disparo del delantero local y hace subir el 1 - 0 al marcador.

Seguirían los asturianos llegando una y otra vez sobre el área gallega y en el 25 es derribado dentro del área Marc Nierga que el colegiado no apreciaría como pena máxima mandando seguir el juego y en el 28 un fuerte disparo de Pedro Montero obligaba al meta de los gallegos a despejar de puños cuando ya se le colaba por la misma escuadra. El dominio en ta primera mitad era total de los locales ante un equipo de Michel Alonso que nada podía hacer ante el mejor juego local limitándose una y otra vez a salir a la contra pero sin peligro alguno para la defensa local. Transcurría el minuto 41 cuando el Langreo estaba en esta primera mitad dando un recital de fútbol, dominando el encuentro a sus anchas, y en ese instante un servicio de Pedro Montero sobre David Álvarez acababa en golazo, ya que éste desde la frontal del área de certero disparo a la escuadra lograba el 2-0 para los locales con lo que se llegaría al final de una primera parte de total dominio local.

En el minuto 47 una jugada de todo el ataque local acaba con disparo de Marenyà raso y ajustado al poste que Alberto en bonita intervención desbarataría el que podría haber sido el tres a cero. Pero a los siete minutos llegaría la diana que metía de lleno a los galaicos en la contienda, un buen tanto de Jacobo Trigo. Una indecisión en la zona media langreana de Adrián Llano, que pierde el esférico y lo aprovecha Álex Ares para libre de marca acortar distancias en el marcador haciendo el 2 - 1 de disparo raso ante la salida de Adrián Torre.

A raíz del gol conseguido por los visitantes, el conjunto gallego se decidió abrir líneas a la desesperada creando la incertidumbre con varios sáquese de esquina y llegando una y otra vez a los dominios del meta local para los locales. En ocasiones de nuevo de Trigo y de Silva el Coruxo metía el miedo en el cuerpo a un Langreo que se descompuso un tanto con la diana recibida.

Pero poco a poco los asturianos comenzaron de nuevo a tocar mejor el esférico en la medular, evitando la presión del conjunto verde y basculando bien el fútbol hacia los costados. Así, mediado el segundo periodo llegaría una jugada de Gayoso por su banda con pase atrás sobre Marenyà, quien franco cara al gol enviaba su disparo alto.

Bajó el juego local tras los cambios efectuados, lo que intentó aprovechar el conjunto gallego para una y otra vez llegar al área local pero en el 87 David Álvarez en jugada individual y ante la salida de Alberto batía al cancerbero en perfecta vaselina para poner prácticamente la sentencia con el tres a uno. Pero poco duró la alegría local ya que instantes más tarde Antón, de fuerte disparo desde fuera del área lograba el 3 - 2 con el que se llegaba al final del choque. Una pena que ese tanto llegara tan tarde, porque ya no le quedó tiempo material a un Coruxo que mejoró mucho en el segundo periodo.