Javier Gómez Noya, único quíntuple campeón del mundo de triatlón, que, tras un año centrado en las pruebas de fondo y en el Ironman de Hawai (EEUU), regresó esta temporada a la distancia olímpica, manifestó ayer que "es posible ganar el sexto Mundial", aunque precisó que "será muy difícil" y que piensa más en los Juegos de Tokio 2020.

Gómez Noya efectuó estas declaraciones en Leeds (Inglaterra, Reino Unido), sede esta tarde de la cuarta prueba del Mundial; un campeonato en el que ocupa, con una puntuación menos que los principales candidatos al triunfo final, la quinta plaza, con 1.716 puntos, 807 menos que el líder, el francés Vincent Luis. En la prueba de esta tarde también competirá el vigués

El astro gallego retornó a la distancia olímpica (1.500 metros a nado, cuarenta kilómetros en bici y diez más de carrera a pie) a finales de abril, firmando un brillante segundo puesto en Bermudas, antes de ser cuarto en Yokohama (Japón) a mediados de mayo. Motivo por el que decidió añadir a su calendario las pruebas sprint (mitad de la distancia olímpica) del Mundial; que se decidirá con la suma de la Gran Final, en Lausana (Suiza), el último fin de semana de agosto; y los otros cinco mejores resultados del año.

"Creo que llego bien a Leeds", explicó Gómez Noya. "Es la tercera prueba en distancia olímpica del Mundial y quizás en Yokohama acusé un poco haber hecho Pontevedra, un prueba de larga distancia (el Mundial, que ganó en 'su' casa) sólo dos semanas antes", señaló.

"Ahora espero estar un poco mejor. Aunque la competitividad va a ser muy alta. Aquí hay un circuito muy duro, muy técnico, complicado; y, además, con los Brownlee en carrera, que siempre añaden dificultad y mucho más corriendo en su casa", comentó Gómez Noya sobre los siempre temibles hermanos ingleses: Alistair -doble campeón olímpico- y Jonathan, que en los Juegos de Rio de Janeiro 2016 (Brasil) secundó al anterior en uno de tantos dobletes que firmaron juntos, entre ellos el de hace dos años, en Leeds, de donde son originarios.

"¿Si es posible ganar el sexto Mundial? Posible sí que es, claro (ríe); pero es muy difícil", explicó ael Premio Princesa de Asturias de los Deportes de 2016. "Y tampoco es mi objetivo prioritario. Como dije desde el principio, mi objetivo es clasificarme para los Juegos de Tokio 2020 este año", añadió.

En ese sentido el gallego tiene claro cuál es el gran objetivo inmediato para él en estos momentos: "Todo pasa por hacer una temporada buena, consistente. Y, a ser posible, también, por hacer una buena prueba test, en Tokio, el 16 de agosto", añadió el campeón ferrolano, que se perdió los Juegos de Rio 2016, por lesión; y que buscará de nuevo la gloria olímpica en la capital japonesa el año que viene.

"Esos son un poco mis objetivos. Pero no voy a renunciar (a ganar el Mundial), en caso de que siga obteniendo buenos resultados", explicó.

"Competir de nuevo contra los Brownlee; y, además, en su casa, es motivante. Llevamos librando muchas batallas juntos; son muchas carreras épicas, las que ha habido, en el pasado. Competir contra ellos siempre es un reto. Te ponen las cosas más difíciles, pero también hacen que saques lo mejor de ti mismo", apuntó el gallego, sin duda una de las principales figuras de toda la historia del deporte español. "Va a ser una prueba muy bonita para el espectador, porque creo que vamos a estar todos los mejores en la salida; y ojalá que haya un gran espectáculo", declaró.

Este Mundial, a diferencia de otras veces, está más abierto que nunca porque Mario Mola, campeón de las tres últimas ediciones, ha conseguido malos resultados esta temporada por sus problemas en la natación. Está saliendo muy mal del agua y los rivales aprietan para descolgarle antes de tiempo. Y por mucho que corra en el último tramo no le da tiempo a llegar.