El Rápido de Bouzas se juega esta mañana en el Baltasar Pujales la vida. Los aurinegros afrontan este penúltimo partido de la temporada en su campo como una auténtica final. Una victoria les permitiría seguir con vida en estas últimas tres jornadas del campeonato; mientras que una derrota pondría al equipo en la picota y con una solución complicada.

La directiva boucense tuvo claro desde hace mucho tiempo que el partido de esta mañana era la gran final, y por eso decidió que la entrada al campo sea totalmente libre. Y es que además el partido cambia de hora al jugar ante un conjunto canario, por lo que el comienzo del mismo está previsto para las once de la mañana en Bouzas.

El conjunto canario llega a este partido con dos puntos de ventaja sobre el puesto de playout de permanencia y un calendario en donde tiene que medirse a otro de los implicados en la lucha por la supervivencia, el Adarve. El Las Palmas Atlético atraviesa por uno de los mejores momentos de la temporada, con una racha de cinco jornadas consecutivas sin conocer la derrota, con dos victorias y tres empates. Nueve puntos que le permitieron salir de una situación complicada y poder ver el futuro con más optimismo.

El Rápido de Bouzas llega a este último mes de competición con uno de sus objetivos cumplidos, y que no era otro que llegar con vida a estas jornadas, algo que no parecía posible al final de la primera vuelta. El problema es que a los aurinegros no les llega con lo que ellos hagan, ya que dependen de otros resultados y, en estos momentos, hay mucho invitados a este baile. A pesar de todas las complicaciones, los jugadores entrenados por Michel Alonso saben que hay que alargar la situación ya que, posiblemente, este sea el grupo más competitivo de los últimos años.

El técnico vigués solamente cuenta con la baja de Antas, que ya no llegará al final de temporada por la lesión de su dedo. Con su ausencia, Michel dispone de los dieciocho jugadores justos para hacer la convocatoria y confeccionar el "once" inicial. Un equipo de salida que, posiblemente, sufrirá modificaciones con respecto al de la semana pasada, que caía ante un Pontevedra lanzado a por una de las plazas que clasifican para la fase de ascenso, con el regreso de Mouriño y de Youssef, que se habían perdido el choque ante los granates.

Michel Alonso permanecería fuel a su sistema con Brais Pereiro bajo palo, con una defensa de cuatro en donde Cotilla y Adrián estarían en los laterales, con Kiko e Iago López por el centro, un doble pivote formado por Toni Jou y Armando. El centro del campo sería para Javi Sánchez y Diz con Mouriño por el centro, y la punta de ataque para Youssef.

Juan Manuel Rodríguez, entrenador del conjunto canario, dio con la tecla que le ha permitido al equipo levantar el vuelo y ver el futuro con un poco más de optimismo. El técnico podría repetir el mismo "once" que el domingo pasado doblegó al Coruxo en Las Palmas con un gol de Carlos González en el minuto veintiocho.

De salida, el cuadro canario podría formar con Vallés en la portería con Athuman y Álex Suárez por el centro de la defensa, con Dani martín y Jesús Fortes en los laterales. Por delante Reina y Juan Rodríguez. En el centro del campo formarán Cedrés y Carlos González en las bandas y Kirian Rodríguez por el centro, con Edu Espiau como jugador más adelantado del cuadro amarillo.

En el Baltasar Pujales confían en que esta mañana los aficionados respondan en buen número al llamamiento que tanto jugadores como cuerpo técnico le hacen, conscientes de la importancia del choque y de la necesidad de sumar los tres puntos en juego para poder llegar con vida a las últimas jornadas del campeonato. De lo que no cabe duda es que el partido tiene todos los alicientes para ser un gran espectáculo, ya que los dos equipos necesitan la victoria para seguir cubriendo etapas.