Akka Essaadaoui por fin conquistó la cima de O Castro, y lo hizo abriendo una nueva vía, hasta ahora inédita, coronando la cima viguesa por la puerta norte de la muralla del monte olívico. Una puerta que se abrió ayer por vez primera para recibir a los más de 400 valientes que desafiaron a la gravedad (la carrera cuenta con un desnivel de 135 metros) y a los escalones, que disputaron así la penúltima cita puntuable para el Circuito de Carreras Populares de Vigo.

La céltica Ester Navarrete completó ayer una semana sensacional y se anotó el triunfo en la categoría femenina en la que era su primera participación en la carrera, organizada por la empresa Singletrack Outdoor Sports.

En una mañana fría pero soleada, alrededor de 400 corredores tomaron la salida de la décima edición de la Subida ao Castro en el Paseo de las Avenidas. El coloso crucero Queen Mary II fue en esta ocasión testigo de la valentía de los participantes, que iniciaron una escalada sin tregua no sin antes esquivar a los turistas de las terrazas de los bares y establecimientos de A Pedra.

Ambiente de lujo para minimizar el esfuerzo. Aplausos de todas las partes del mundo para el conquistador de O Castro, que en esta ocasión fue el atleta de origen marroquí Akka Essaadaoui. La de ayer era su segunda participación. En su debut (en 2009) tuvo que conformarse con la segunda plaza, por detrás de Óscar Piñeiro, pero en esta ocasión no perdonó. Se mantuvo en cabeza durante todo el recorrido, sin bien en los instantes iniciales rodó junto a Miguel Daporta y Rafael Fuentes.

Al llegar al primer escalón se acabó la lucha. Las piernas de Akka asumieron el esfuerzo, abrazaron el sufrimiento e iniciaron un ascenso sin tregua hasta la cima. Paró el crono en 11:25.861, imponiéndose con 4,8 segundos de ventaja por delante de Miguel Daporta. Fuentes completó el podio (11:32.926).

Akka Essaadaoui ha demostrado encontrarse fuerte. La Carrera Pedestre do Nadal/Carreira do Pavo será su próximo reto. Máxima ambición para una cita en la que ya logró imponerse el año pasado.

En la categoría femenina no hubo sorpresas. Pese a su condición de novata, Ester Navarrete lideraba las quinielas de candidatas al triunfo. La céltica venía de ganar en la Invasión Celeste del pasado martes. Había superado una lesión en el Aquiles y un proceso febril, pero salió reforzada de su triunfo en Balaídos. Así que se plantó en la cima de O Castro diciendo: "¿Ya está, ya se acabó?". Se le hizo incluso corto, aunque duro, el recorrido de una carrera que confesó que le gustó especialmente.

Llegaba dispuesta a sufrir y lo hizo, sobre todo a partir del Concello. Pero su cuerpo respondió a la perfección a un reto nuevo. Controló en todo momento a la canguesa María Jesús Gestido, que apenas opuso resistencia al comprobar la dureza del trazado. Así, Navarrete paró el crono en 13:14.419, con un minuto y siete segundos de ventaja sobre Gestido, que finalizó en segunda posición. Blanca Labandeira, con un tiempo de 14:55.075, completó el podio, mientras que la céltica Cristina Estévez (segunda en la Invasión Celeste) concluyó cuarta.

También hubo clasificación para las categorías menores, en las que Shalma Rodríguez y Pedro Vázquez fueron los mejores en alevín. Mateo Janeiro fue el mejor en benjamines, mientras que Sofía Abreu e Iago Carballo fueron los primeros clasificados en cadetes. Paula Carballo y David González lideraron la clasificación infantil, mientras que en júnior, los más destacados fueron María Alonso y Manuel Abreu. Finalmente, Sandra Sobreira y José Luis Somoza destacaron en promesas.