El entrenador del Real Celta, Eduardo Berizzo, el Toto, se mostró al término del encuentro disputado ayer en el Ramón Sánchez Pizjuán muy satisfecho por el triunfo celeste (1-2), tres puntos que su equipo consiguió después de haber jugado "un primer tiempo perfecto". "Realmente el primer tiempo fue de un dominio absoluto, donde la pelota se jugó con mucha inteligencia", afirmó en la sala de prensa del estadio sevillista el preparador argentino, que añadió: "Ha sido un primer tiempo de lo mejor en esta temporada".

"En la segunda parte, con Llorente en el Sevilla, nos echaron mas atrás, pero el equipo se comportó con suficiencia, oficio y con contras para aumentar el marcador", relató el entrenador celeste tras conquistar por primer vez como técnico el Ramón Sánchez Pizjuán.

Eduardo Berizzo valoró especialmente el triunfo conseguido ayer frente al equipo de Unai Emery después del empate cedido en Balaídos frente a Las Palmas, que generó algunas dudas. "Estos tres puntos son muy importantes en un campo tan difícil y ante un grandísimo rival como éste", destacó el estratega argentino.

El entrenador del Celta se mostró también muy molesto con el horario fijado para este partido, al mediodía en Sevilla en el mes de septiembre, y subrayó en este sentido que "los jugadores corrieron grandes riesgos".

"La programación de los partidos necesita de un análisis mas profundo. Es un sinsentido jugar en esta época del año a las doce en Sevilla y en invierno a las diez de la noche en el norte. Además me pareció extraño que el árbitro no concediese un tiempo para la hidratación de los jugadores, parece que no estaba programado pero se necesitaba", argumentó.

Sobre el juego de Nolito, el mejor ayer de los celestes sobre el terreno de juego, Eduardo Berizzo manifestó que "cuando engancha las dos fases, la ofensiva y la defensiva, es letal, porque además de sus jugadas individuales también habilita a los compañeros".

Finalmente, sobre los diez puntos en cuatro jornadas que lleva el Celta, el entrenador celeste se mostró cauto al precisar que "el objetivo es el mismo, ganar cada siete días al equipo que esté delante", entre los que aludió al Barcelona, al que se medirán el miércoles en el estadio de Balaídos.