El Barcelona, líder en solitario de la Liga, afronta hoy la cuarta jornada en el Camp Nou apurado por las bajas por lesión, ante un Levante que aún no ha ganado en el campeonato y que tampoco sabe lo que es arrancar un triunfo en el feudo azulgrana.

El triunfo sin paliativos del Barcelona la semana pasada en el Calderón (1-2), aupó a los azulgrana a un liderato en solitario que pondrán en juego después de haber sufrido una nueva baja: la de Rafinha.

Se suma a la larga lista de ausentes (Vermaelen, Bravo y Douglas), a la espera de que el lateral brasileño Dani Alves pueda recibir el alta en breve. A ello, también se añade el sancionado Gerard Piqué, que hoy cumplirá el último partido.

El arranque barcelonista este curso es extraño, ya que es uno de los menos goleadores de los últimos años: ha ganado sus tres anteriores partidos con sólo cuatro goles, y a ello se suma un goteo constante de bajas.

Por ello, ante un calendario apretadísimo y exigente para los azulgrana, Luis Enrique Martínez deberá empezar a rotar a jugadores y a echar mano de los futbolistas del filial, especialmente para cubrir las dieciocho fichas de cada partido. De hecho, en esta convocatoria entrará el joven Gerard Gumbau.

Ante el Levante, la recuperación de Dani Alves es vital, ya que el comodín en el que se había convertido Sergi Roberto para ocupar el lateral derecho, podría ser utilizado por Luis Enrique para contar con más opciones de mover el centro del campo.

Alves lleva de baja desde el primer partido de Liga contra el Athletic, en el que sufrió una lesión en el aductor de la pierna derecha.

A Luis Enrique el partido del Levante se le presenta como un gran reto para que el Barcelona siga como líder, así como superar una jornada sin que la enfermería se le llene con otro integrante.

El Barcelona viene de empatar el miércoles en su visita al Roma, en la primera jornada de la Liga de Campeones (1-1), pero si hubiese afinado la puntería un poco más, el triunfo no se le hubiese escapado. Se da continuidad a la excelente actuación que tuvo el grupo azulgrana la semana pasada contra el Atlético de Madrid, con el que cerró con un gran partido un trío de encuentros de máxima exigencia que se le habían plantado en el arranque de temporada.

El Levante viaja tras el buen empate logrado en casa ante el Sevilla y con el reto de puntuar por primera vez en el campo del Barcelona, pues hasta ahora ha perdido los diez partidos que ha jugado allí, con un balance de 38 goles en contra y solo siete a favor.

El entrenador del Levante, Lucas Alcaraz, tiene la baja por sanción de Simao Mate, pierde también a David Navarro, aquejado de un fuerte vértigo durante toda la semana, y prescindió por decisión técnica de Jesús, Xumetra y Pedro López. Alcaraz anuncia rotaciones para afrontar tres partidos de Liga en apenas siete días.