- ¿Le ha cambiado mucho la vida en las últimas semanas?

- No demasiado. Sigo igual, trabajando día a día para intentar ayudar al equipo en lo que pueda, como siempre, vamos.

- Pero su responsabilidad en el equipo ha crecido. No es lo mismo defender la portería desde la titularidad que desde la suplencia.

- Sí, cuando uno es titular tiene más responsabilidad, pero trato de enfocar las cosas con la misma actitud. El trabajo es el mismo y jugar el fin de semana es el premio. Hay que disfrutarlo e intentar que el equipo se sienta a gusto conmigo en la portería.

- La Primera División no es una novedad para usted. Hace un par de años fue titular en el Bernabéu y la pasada disputó los últimos tres partidos de Liga. La diferencia es que ahora tiene la presión de mantener la regularidad.

- Al final, digámoslo así, tienes que afrontar cada partido como una oportunidad. Defender las colores del Celta en Primera División es una gran responsabilidad y tienes que intentar disfrutar del trabajo cada fin de semana. Ésa es mi filosofía.

- ¿Qué balance hace de la portería en estos dos primeros partidos de Liga?

- Creo que es positivo. El nivel de juego del equipo es bueno, tanto a nivel de juego como de resultados, quizá mejor de juego que de resultados. Ahora se trata de mejorar partido a partido, empezando por el del sábado, a ver si podemos mantener la portería a cero.

- Aunque Berizzo lleva apenas un par de meses al frente del Celta, da la sensación de que el equipo está hecho, que no hay que construir un modelo de juego como el año pasado.

- Sí, aunque también hay que tener en cuenta que la mayoría del equipo ya estaba el año pasado. Esto es importante para que los que vienen de fuera se sientan más a gusto. La dinámica es parecida a la del año pasado y hemos cogido rápido las ideas que nos ha inculcado el nuevo entrenador.

- La impresión es que el equipo tiene muy claro a qué juega y cómo tiene que jugar.

- Sí, sabemos lo que tenemos hacer en el campo y tener las cosas claras es fundamental para cualquier equipo. Tenemos clara la idea del técnico y tenemos que seguir trabajando porque la temporada es larga y seguro que habrá dificultades.

- Desde el punto de vista del portero, ¿no es arriesgado jugar con la defensa tan adelantada?

- No me parece especialmente arriesgado. Es la forma del jugar del equipo, pero no me parece un inconveniente. Al contrario, me gusta jugar con la defensa adelantada, me obliga a estar en tensión. Es nuestra forma de jugar y no vamos a cambiarla porque sea más o menos arriesgada.

- Le gusta jugar con la defensa adelantada y también con los pies.

- Bueno, intento hacerlo lo mejor posible, una veces las cosas salen mejor y otras peor. Intento hacerlo lo mejor posible y que la defensa se encuentre cómoda.

- Con la mano tampoco se le da mal, la prueba es el tercer gol contra el Getafe, en el que le pone el balón en el pie a Augusto en círculo central. ¿Recuerda la jugada?

- Claro. Atrapé el balón en la frontal del área y vi que venían a presionar y dejaban espacios a sus espaldas, así que le puse el balón a Augusto, que se desmarcaba de Diego Castro. Augusto hizo un control increíble, hizo una gran jugada y se la dio a Larrivey, que definió perfecto. La verdad es que el mérito del gol fue todo suyo.

- Viene la Real, un hueso duro que va a calibrar el estado de forma del Celta.

- Sí, las sensaciones en los dos primeros partidos han sido muy buenas pero esto es muy largo y tenemos un partido muy complicado con la Real Sociedad, que se un rival muy duro. Viene de ganar al Madrid y sabemos que tenemos que afrontarlo con la mayor concentración posible, intentado defender nuestra idea de fútbol. Así tendremos más opciones de ganar.

- ¿Le conviene al Celta aun partido de intercambio de golpes, como los del año pasado ?

- El año pasado, sobre todo en el partido en Anoeta, remontaron después de una jugada a balón parado cuando parecía que teníamos el partido controlado. Fue un partido loco, de los que siempre hay en la temporada. El sábado intentaremos tener el mayor control posible porque ellos con espacios son un equipo muy peligroso. Hay que tener más control.