Noventa y cinco días después de su accidente de esquí, el piloto alemán Michael Schumacher, ha comenzado a dar signos de un 'despertar' de su coma inducido. Familiares, amigos y fans celebraron la noticia, aunque médicos que opinaron sobre este caso apuntaron que hay que recibir la información con "cautela". Sin saber los datos exactos del paciente y sin poder explorarlo, los expertos consultados no se atreven a ofrecer un pronóstico, pero sí aventuran algunas de las vías que se pueden abrir a partir de ahora. El neurólogo gallego Miguel Blanco, coordinador del área neurovascular del Complexo Hospitalario de A Coruña (CHUAC), indicó que esos primeros signos de consciencia anunciados por el portavoz familiar son "una buena señal, sin duda".

No obstante, el vocal de la Sociedad Española de Neurología (SEN) José Manuel Moltó, apuntó que "realmente no sabemos en qué ha consistido el 'despertar' que le atribuyen. Hay un embargo importante de información alrededor de este caso. En principio, se espera que salga con lesiones neurológicas muy grandes" que podrían afectar a sus capacidades mentales, motoras o a ambas.

Aunque la familia desmiente que Schumacher se encuentre en estado vegetativo, tanto Moltó como Blanco no lo descartan. "Tras el coma, se puede entrar en estado vegetativo. El paciente tiene los ojos abiertos no es consciente porque no mantiene una relación con el medio. Probablemente, ahora Schumacher comience esta fase en la que, aunque están con los ojos abiertos, no responden con la mirada, no nos siguen el movimiento".

Blanco agregó que -en el caso de traumatismos craneoencefálicos severos que pasan por el coma- se da aproximadamente el plazo de un año para empezar la recuperación de cara a ser independiente, aunque "es difícil evaluarlo", ya que depende de cada caso.

Otra posibilidad que se abre es que se pase al estado de mínima consciencia. En este, el paciente "conecta con algunas cosas, sigue con la mirada, puede decir sí o no, tiene un ritmo de sueño normal incluso con alguna fase REM. Es el mejor pronóstico pero hay que ser muy cauto".

Moltó considera que la escueta descripción del estado de Schumacher que se ha facilitado "es compatible con el estado vegetativo, en el que se tiene una capacidad de interactividad con el ambiente muy baja". El vocal de la SEN añadió que "nunca hay plazos razonables" para determinar cuándo se recuperará un paciente.

Esta, para el médico, podría deembocar en "daños que se van a minimizar ya que contará con todos los medios del mundo para su rehabilitación", si bien "los daños neurológicos que ha tenido creo que han sido importantes".