La Vig-Bay desconoce cuál es su techo y posiblemente tardará varios años en descubrirlo. La carrera popular más multitudinaria de las que se celebran en la provincia de Pontevedra -y una de las media maratones de referencia en toda España- vivirá este domingo su decimoquinta edición con récord de participantes.

Hace casi dos semanas la organización anunció que se habían agotado los cinco mil dorsales que había a disposición de los atletas populares. Un momento simbólico en la historia de la carrera, que se puso en marcha a finales de los ochenta con apenas un par de centenares de corredores que estrenaron un recorrido que ha hechizado a los populares. Desde ese momento la Vig-Bay ha ido dando pequeños pasos con el fin de no fallar en la atención a los deportistas, una de sus máximas. "Está claro que podíamos aumentar el número de inscritos, pero corremos el riesgo de que se nos vaya de las manos. Por eso insistimos en crecer pero poco poco, de un modo controlado", suele explicar Pilar Ruiz, la responsable de la organización. Este año la frontera se estableció en los cinco mil deportistas y el 18 de marzo se completó una cifra que en Galicia no alcanza ninguna media maratón.

Hace un año el crecimiento de la prueba obligó a modificar un recorrido que había permanecido casi inalterado. Se suprimió la vuelta en la Avenida de Samil (donde los atletas completaban los primeros tres kilómetros) porque la cabeza de la carrera, debido al lento proceso que supone una salida tan masificada, amenazaba con alcanzar a la cola antes de abandonar la playa. Se optó por dar la salida lanzada en dirección a Canido y recuperar esa distancia en Nigrán y en la vuelta que se da al Monte Lourido, después de Praia América. Ese repecho a poco más de cinco kilómetros para el final es un serio escollo a salvar en un momento en que las fuerzas comienzan a flaquear.

La Vig-Bay supone uno de los platos fuertes del calendario de carreras populares de Vigo que reúne durante 2014 un total de diez pruebas y que este año espera congregar a más de 15.000 participantes. Solo la Vig-Bay ya completa un tercio de ese objetivo.

La edición de este año reúne en su línea de salida a tres vencedores en anteriores ediciones. El ganador de 2013, Lolo Penas, aparece como el principal favorito aunque no se lo van a poner sencillo otros dos vencedores de la Vig-Bay como son Elías Domínguez y Hassan Lekhili, que parece haber dejado atrás los problemas físicos que arrastraba desde hace tiempo. José Antonio Ramallo o el portugués Bruno Soares son otros candidatos. En categoría femenina, ante la ausencia de María Jesús Gestido -ganadora hace un año-, la principal aspirante a la victoria es María Yolanda Gutiérrez, con Beatriz Fernández y Ofelia Blanco como principales rivales. Esa será la batalla por la victoria, pero detrás de ellos el domingo habrá otros cinco mil duelos, los que librarán cada uno de los participantes contra el reto que se han marcado en esta Vig-Bay.