A Madroa sigue afianzándose como una de las mejores factorías de jugadores del país. La apuesta por la cantera ha dado sus frutos al Celta. El club vigués ha regresado a Primera y ha pagado parte de su deuda económica gracias al rendimiento de los jugadores formados en las categorías inferiores. Esa producción no cesa. Entre esas perlas destacan Jonny y Rubén Blanco, dos futbolistas que están llamados a liderar el Celta del futuro.

El portero y el defensa son dos habituales en las categorías interiores de la selección española. La Federación Española de Fútbol ha vuelto a citar al vigués y al mosense para la jornada de entrenamientos que la sub´19 realizará en Las Rozas del 21 al 23 de enero. Por tanto, Jonny y Rubén Blanco se ausentarán de los primeros entrenamientos que realice el Celta la próxima semana.

El lateral y el guardameta celestes son dos fijos en el filial. Su próximo objetivo es recalar en un primer equipo que luchará esta temporada por mantenerse en la máxima categoría. Paco Herrera ya ha mostrado su plena confianza en los dos canteranos. De hecho, el técnico extremeño ha dado la titularidad a Jonny ante la grave lesión de Hugo Mallo. El vigués está dejando de ser una promesa para convertirse en una realidad. Por otro lado, Rubén Blanco todavía sigue en su fase de madurez. Sus condiciones son impresionantes. Muchos apuntan que el mosense será, a medio plazo, el meta titular del conjunto vigués. El futuro del Celta sigue encomendado a su factoría de A Madroa.