Una poza de valor etnográfico

Covelo solicita a la Xunta la catalogación del conjunto formado por la Poza de Piñeiro, la Cruz de Porteliña y la Choza da Poza

Poza de Piñeiro, ubicada al suroeste de la Serra do Suído, en Covelo.

Poza de Piñeiro, ubicada al suroeste de la Serra do Suído, en Covelo. / D.P.

El Concello de Covelo quiere poner a salvo su patrimonio, por lo que ha solicitado a la Dirección Xeral de Patrimonio Cultural de la Xunta de Galicia la catalogación del conjunto formado por la Poza de Piñeiro, la Cruz de Porteliña y la Choza da Poza como “Lugar de Valor Etnológico”. Se llama así a ámbitos en los que permanecen testimonios relevantes y reconocibles de actividades o construcciones vinculadas a las formas de vida y cultura tradicional del pueblo gallego que resulten de interés histórico, arquitectónico, arqueológico, etnológico o antropológico, tal y como recoge la Ley 5/2016, del 4 de mayo, del Patrimonio Cultural de Galicia.

Las infraestructuras a proteger datan de 1851 y constan de una construcción hidráulica, una cruz baja y una choza granítica de pastores, perteneciente a la Comunidad de Montes de Piñeiro. El Concello propone su inclusión en el Catálogo del Patrimonio Cultural de Galicia apelando a la Ley 5/2006, del 30 de junio, que hace referencia a la protección del patrimonio etnográfico e histórico-cultural relacionado y al artículo 26 de la ya mencionada Ley 5/2016 del Patrimonio Cultural de Galicia.

Ubicada en el barrio de Piñeiro da Igrexa, en un pequeño valle fluvial de media montaña situado en el suroeste de la Serra do Suído, la Poza de Piñeiro es en la actualidad un atractivo turístico para las personas a las que les gusta el deporte de montaña y disfrutan de un entorno natural con vistas privilegiadas. Ciclistas, corredores y senderistas llegan hasta la Poza de Piñeiro para observar su fauna y flora. Un lugar alejado del ruido.

Favorecer el regadío

La poza se construyó a mediados del siglo XIX sobre el río Piñeiro para favorecer el regadío de las tierras de labranza de los vecinos y vecinas de las parroquias de Piñeiro y Barcia de Mera. Y ya en la segunda mitad del siglo XX se añadió la represa de granito original.

Su titular, la Comunidad de Montes de la parroquia de Piñeiro, conserva documentación histórica que data de 1851 y que acredita el regadío de las parroquias de Piñeiro y Barcia de Mera, así como de los correspondientes libros de regantes y repartos de agua de ambas freguesías.

En torno a la poza se levantaron la Cruz da Porteliña, a 820 metros de altura, y la Choza da Poza, una construcción etnográfica de planta rectangular que presenta unas características constructivas singulares para la zona y que se utilizaba como antiguo refugio de pastores.

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