Un vecino de Pontevedra, N. C. M. G., aceptó ayer una pena de dos años de prisión como autor de un delito contra la seguridad vial por conducir bajo los efectos del alcohol, en concurso con otro de homicidio imprudente y dos más de lesiones por imprudencia grave. Y es que en el accidente que se produjo a causa de su conducción negligente falleció una mujer de 52 años vecina de Caldelas de Tui y resultaron heridos su esposo y su hijo.

El magistrado condenó al acusado a estos dos años de cárcel, pena que será suspendida al no contar con antecedentes penales. Una suspensión que está condicionada a que no vuelva a delinquir durante el tiempo de la condena. Además, se le retira el derecho a conducir vehículos a motor por cinco años, lo que equivale a la pérdida del carné.

La condena se produce después de que el acusado llegase a un acuerdo con la Fiscalía y la acusación particular y se le apliquen los atenuantes de confesión tardía y dilaciones indebidas, por el retraso que acumuló esta causa en los juzgados. Así, la pena inicial de 4 años que reclamaba el fiscal se redujo a la mitad.

Los hechos se remontan al 24 de noviembre de 2018. Sobre las 23 horas y a la altura del kilómetro 111 de la AP-9, a la altura del municipio de Caldas, el joven adelantó al vehículo en el que circulaba esta familia de Caldelas de Tui y debido a su estado y encontrarse bajo los efectos del alcohol se desplazó bruscamente a la derecha, invadiendo el carril por el que circulaba la víctima.