La falta de una junta directiva legal complica la municipalización del agua de la parroquia de Vilaza, tal y como quieren los usuarios.
El alcalde de Gondomar, Francisco Ferreira, reconoció ayer que una directiva legal, interlocutora del Concello, facilitaría los trámites y podría ordenar a la empresa que gestiona la red la reposición de contadores averiados (más de 40), lectura periódica de los mismos “y el cobro de recibos por consumo, algo que el Concello no puede hacer por no ser el titular de la red de agua”.
El alcalde cree que “los comuneros y vecinos que muestran su interés en agilizar la municipalización a través de sus escritos deben reunirse y constituirse en una nueva directiva para así, junto con el Concello, agilizar la tramitación y cobrar los consumos, hacer reparaciones, leer contadores e incluso estudiar nuevas altas ordenando a la empresa encargada del servicio las directrices a seguir hasta la municipalización del mismo”. De esta manera, la empresa podría resarcir la deuda de más de 20.000 euros que los usuarios le adeudan de antes de disolverse la anterior, así como otros gastos del servicio desde esa fecha hasta la actual, y también poder retirar y poder cancelar la cuenta corriente existente en Abanca a nombre de la directiva anterior.
El alcalde anunció una reunión con vecinos y vecinas que urgen una solución a la problemática “y tiene que salir una directiva nueva interina que represente a los comuneros y que, de la mano con el Concello, lleguemos cuanto antes a la municipalización del servicio”.
En una asamblea convocada por el BNG, el vecindario de Vilaza acordó reclamar del gobierno local acciones urgentes e inmediatas para regularizar el servicio de abastecimiento de agua en la parroquia y recoger firmas al respecto.
Vecinas y vecinos también acordaron reclamar al gobierno municipal que se realicen de manera urgente e inmediata las acciones necesarias para regularizar la situación.
