Mondariz tala cinco tilos de la plaza en estado de podredumbre

A simple vista parecían árboles sanos, pero suponían un riesgo

Retirada de los árboles talados esta semana en la Plaza de España de Mondariz. // D.P.

Retirada de los árboles talados esta semana en la Plaza de España de Mondariz. // D.P.

El Concello de Mondariz ha cortado cinco de los icónicos tilos de la Plaza de España por su deteriorado estado de conservación y para evitar posibles derrumbes. Varios operarios municipales llevaron a cabo los trabajos con la ayuda de dos vehículos con grúas. Una vez derribados, los pies de los árboles mostraron un avanzado estado de podredumbre interna que a simple vista era imposible de percibir. A pesar de ello, la operación provocó reacciones dispares entre los vecinos que fueron testigos directos o indirectos a través de las redes sociales, ya que estos tilos eran muy queridos al ser iconos de la plaza.

"No podíamos esperar a que hubiera caídas de ramas o mismo de pies para actuar", indica el alcalde

“Cortar árboles nunca es una decisión fácil, pero había que ser prudentes. No podíamos esperar a que hubiera caídas de ramas o mismo de pies para actuar; ya teníamos informes técnicos que recomendaban sustituir y mismo eliminar algunos de los tilos porque la podredumbre interna estaba demasiado avanzada”, comenta Xosé Emilio Barros, alcalde de Mondariz.

En 2020, en respuesta de una solicitud expresa del alcalde, la Estación Fitopatolóxica do Areeiro realizó una evaluación técnica del estado de los icónicos tilos de la Plaza de España, en la que se corroboraba el diagnóstico de un estudio previo emitido en el año 2015: una peligrosa tendencia a la podredumbre en los pies de los árboles, derivada de las podas hechas durante años para darles una estructura artificial de candelabro.

Después de una evaluación visual preliminar de los 35 tilos de la plaza, en el informe técnico se recomendó sustituir y eliminar al menos cuatro pies; mantener la vigilancia sobre otros 25 pies por diferente nivel de riesgo; ir sustituyendo o incluso eliminando los pies más desequilibrados; sanear aquellos que presentaran ramas secas y defectos estructurales y separar el empedrado de las proximidades de los árboles.

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