La instalación de un semáforo en la carretera N-550, en el entorno del colegio Outeiro das Penas, en Cesantes, pone fin a la demanda histórica del vecindario y de la comunidad escolar para mejorar la seguridad viaria en la zona, que registra un elevado tránsito peatonal.

Por ese punto circulan a pie, diariamente, no solo numerosos vecinos y vecinas sino peregrinos de paso en el Camino de Santiago, al igual que durante el curso escolar, el alumnado y familiares del CEIP Outeiro das Penas.

La alcaldesa Digna Rivas quiso agradecer la “colaboración y trabajo incansable” de la ANPA del colegio Outeiro de las Penas que, con las gestiones realizadas desde la Alcaldía, “consiguieron dar solución a un grave problema de seguridad viaria que afectaba, muy directamente, al vecindario y a los niños y niñas del Outeiro das Penas”.

El paso de cebra regulado por semáforo quedó instalado entre las dos paradas de autobús y la intersección de acceso al colegio. La actuación, reivindicación histórica de la parroquia de Cesantes, es similar a la que el Concello de Redondela acordó con la comunidad escolar del CEIP Alexandre Bóveda de Angorén, en Chapela, instalando un semáforo adicional en la N-552.