Más residuos dejados de forma ilegal en A Guarda. | // FDV

Hay personas que siguen siendo incívicas pese a las continuas campañas de concienciación social, especialmente en una situación tan compleja como la actual provocada por el coronavirus. De ello dan fe en A Guarda. En las últimas semanas se han acentuado los vertidos ilegales junto a contenedores a lo largo del municipio. Concretamente son tres, entre los que se encuentra uno en la parroquia de Salcidos y otro junto al camping de Santa Tecla. Los responsables de lo que se pueden considerar atentados al medio ambiente tienen siempre el mismo modus operandi: dejan residuos que deberían ir al punto limpio tirados frente a contenedores de basura orgánica o de plástico. El problema es que entre estos residuos se encuentran habitualmente algunos contaminantes, como restos de la famosa uralita, y también electrodomésticos enteros, como televisiones e incluso neveras. También es frecuente que aparezcan colchones usados.

Se da la casualidad además que uno de los puntos de vertido habituales se sitúa a un kilómetro escaso del punto limpio de A Guarda, que además tiene un horario amplio y funciona de lunes a sábado. “Tenemos conocimiento de lo que está pasando y ya hemos elaborado un informe. Estamos intentando averiguar quiénes pueden ser los responsables”, asegura el concejal de Servicios de A Guarda, Miguel Español.

El servicio de recogida de residuos contratado por el Concello se encarga de recoger estos desechos tirados de forma ilegal y llevarlos al punto limpio, lo que conlleva además un gasto para las arcas municipales. El problema es que tienen que hacerlo casi a diario, porque los vertidos son continuos. “Está pasando con demasiada frecuencia y es una infracción muy grave. Ya hemos abierto expediente a algunas personas que dejan pequeñas cosas, como cajas, fuera de los contenedores, pero nos falta saber quiénes son los responsables directos de esos grandes vertidos habituales. Lo que está claro es que son gente desaprensiva y con una importante falta de concienciación ambiental. Además no son hechos casuales, los responsables son conscientes de que están cometiendo una infracción grave”, indica el edil guardés. Se sospecha que los autores de estos vertidos son vecinos del propio municipio, ya que hay que recordar que A Guarda lleva ya una semana con cierre perimetral decretado por las autoridades sanitarias (cierre que ahora se ha determinado de forma conjunta con Tomiño y O Rosal). Y es que el fenómeno de los vertidos ilegales de electrodomésticos y residuos contaminantes lleva semanas golpeando al municipio guardés pero se ha acentuado de forma importante los últimos días. La Policía Local está atenta y espera poder coger in fraganti a los responsables, a los que se les impondría una importante sanción económica.

Además, los culpables de estos hechos eligen sitios que en muchas ocasiones tienen un importante valor ambiental, como el mencionado punto junto al camping de Santa Tecla, que está a escasos metros del río Miño. Suele ser una zona de paseo para los guardeses, que tienen que ver cómo el mal comportamiento de unos puede contaminar un entorno privilegiado.

El gobierno local considera que incluso es más difícil dejar los residuos contaminantes, los electrodomésticos y los colchones en las zonas de contenedores normales que llevarlos al punto limpio. Además, hay que tener en cuenta que el Concello tiene un servicio de recogida de trastos usados a domicilio. Los vecinos solo tienen que llamar para que pasen a recoger lo que ya no utilizan y no pueden tirar en los contenedores de basura normales.

Desde el Ayuntamiento guardés apuestan por intensificar la campaña de concienciación social de protección del medio ambiente y sobre todo dar a conocer esos servicios disponibles en el municipio, como el propio punto limpio o el la recogida a domicilio de electrodomésticos o enseres usados.