La alcaldesa de Salceda de Caselas, Dolores Castiñeira, ofrece a la Xunta los edificios municipales del antiguo centro de salud y de la antigua escuela unitaria de A Revolta para la disminución de las ratios escolares en el colegio Altamira y en el Raíña Aragonta. Por el momento, el Gobierno autonómico no tiene previsto implantar medidas de este tipo de cara al comienzo del curso.

A través de un escrito dirigido a la Consellería de Educación, Universidade e Formación Profesional, Castiñeira apunta a la vuelta presencial a las aulas con "en estos momentos más de 800 niños" entre ambos colegios, de infantil y primaria respectivamente. Según advierte la regidora, las instalaciones actuales de los dos colegios "no permiten la distancia física suficiente entre los niños que garantice una mayor seguridad" ante la pandemia de la COVID-19.

En estas circunstancias, el Ayuntamiento entiende "fundamental la disminución de las ratios" y ve "indiscutible" la colaboración entre administraciones para lograr tal fin.

Por ello, pone a disposición de la consellería el edificio del antiguo centro de salud, en pleno casco urbano, y la antigua aula unitaria de A Revolta, en la parroquia de Parderrubias. En el pleno del próximo jueves solicitará el cambio de uso del primero de ellos "dando también cabida al uso educativo".