Aspas y Griezmann, duelo clásico

Balaídos acoge el domingo un duelo entre dos clásicos de LaLiga: Iago Aspas y Antoine Griezmann. El gallego y el francés se enfrentarán por vigésima vez desde que el 16 de enero de 2010 coincidiesen en Vigo en un partido de Segunda División que ganó la Real Sociedad con un gol de Nsue. Trece años después se repetirá el duelo entre dos estrellas del planeta fútbol. Hasta el momento, el balance favorece claramente al campeón de mundo con Francia: 13 victorias por cuatro derrotas y dos empates, vistiendo las camisetas de Real Sociedad, Barcelona y Atlético de Madrid.

A Aspas no le han ido bien los duelos con el francés ni tampoco, hasta el momento, sus apariciones ante el cuadro colchonero: el moañés solo ha anotado dos goles en las veinte ocasiones que se midió al próximo rival del Celta en el campeonato regular. En su etapa en el Sevilla nunca se enfrentó a los rojiblancos.

El domingo coincidirán de nuevo Aspas y Griezmann en Vigo, en un partido de la vigesimoprimera jornada de LaLiga, al que ambos equipos llegan con sensaciones contrapuestas. Los célticos han cargado las baterías de optimismo después de sumar ante el Betis (3-4) el segundo triunfo consecutivo y abrir brecha sobre los puestos de descenso. Los colchoneros son rehenes de las dudas después de sumar un empate en casa ante el Getafe (1-1) en un irregular curso que les ha llevado hasta la cuarta plaza de LaLiga y eliminados de la Copa del Rey. Pobres resultados de una plantilla construida para pelear por los títulos.

A diferencia de su equipo, Griezmann (Mâcon, 1991), disfruta de uno de sus mejores momentos deportivos desde que juega en España. Su actual entrenador, Pablo Simeone, le ha concedido por fin carta blanca para moverse con libertad entre líneas o tomando las riendas del juego de ataque de los rojiblancos. Así es como ha brillado con la selección francesa que fue campeona del Mundo en 2018 y finalista en Catar el pasado diciembre. Su segunda etapa en el club del Metropolitano, tras su fracasada estancia en el Barcelona, le ha devuelto la condición de estrella colchonera. En ese tránsito, Griezmann ha reducido su capacidad goleadora, pero ha ganado en importancia en la mecánica del juego del grupo, en el que aparece como la referencia indiscutible, sobre todo tras la marcha del portugués Joâo Félix al Chelsea.

En lo que va de curso, el francés suma 6 goles y otras tantas asistencias. Esos buenos números los registra después de aparecer en el banquillo en más ocasiones de las esperadas. Solo ha sido titular en trece de los veinte partidos del campeonato regular. En un principio se apuntó que el Atlético de Madrid intentaba reducir los minutos de juego de Griezmann para no verse obligado a pagar una cláusula de penalización que había establecido el Barcelona en el contrato de traspaso. En las ocho últimas jornadas ha sido titular, aportando tres goles y una asistencia, además de llevar la batuta de un equipo en el que Morata es el máximo goleador, con 7 tantos, y Correa aparece con 5 dianas.

Aspas, por su parte, pudo cruzarse en el camino de Griezmann, pues el moañés reconoció públicamente que el Atlético de Madrid se interesó por él como sustituto del francés cuando éste firmó por el Barcelona. “Sé que hubo interés, porque tanto mi hermano como mi agente me lo dijeron”, apuntó la estrella céltica en mayo de 2021. Cuando el atacante rojiblanco barajaba marcharse incluso a algún club inglés, Aspas le dio consejos: “Griezmann está en un gran equipo, pero a veces es complicado decir que no a la Premier”.

El moañés, que brilló en aquella eliminatoria de Copa en el Vicente Calderón en 2010 con un Celta repleto de canteranos, no le ha encontrado el punto débil al rival que el domingo jugará en Balaídos a las 16:15 horas. Veinte partidos ha disputado el moañés contra el Atlético, todos con el Celta. Y solo ha podido celebrar dos victorias (en LaLiga en 2018 con Mohamed de entrenador y una en la Copa en 2017 con Berizzo).

En esas veinte ocasiones que se enfrentó a los colchoneros, Aspas solo anotó un par de goles y tres asistencias. Ese balance es mejor que el número de tarjetas recibidas por el céltico en esos duelos (7 amarillas). En unos días podrá mejorar esos números, en el duelo con el francés.

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