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Un arma inesperada

El Celta ha anotado la tercera parte de sus goles desde fuera del área, una faceta en la que el conjunto vigués apenas se había prodigado en las últimas temporadas

Veiga y Larsen. MARTA G. BREA

El Celta ha encontrado esta temporada un arma inesperada en los lanzamientos desde fuera del área, una faceta del juego en la que el conjunto que dirige Eduardo Coudet apenas se había prodigado en las últimas temporadas y a la que este curso está sacando un espectacular rendimiento.El dato es contundente: una tercera parte (3 de 9) de los goles anotados por el equipo vigués en los siete primeros compromisos ligueros han llegado en lanzamientos de larga o media distancia desde el exterior del perímetro. Curiosamente, los tres goles que el Celta ha marcado desde fuera del área se han registrado en los dos últimos partidos que el cuadro celeste ha disputado en Balaídos, dos frente al Cádiz y otro ante el Betis.

Y los tres goles llevan firma de la cantera. Aspas le marcó dos al Cádiz en la cuarta jornada contribuyendo de forma decisiva a la primera victorias de los celestes como locales y Gabri Veiga anotó el pasado domingo el que supuso el triunfo frente al Betis cortando la racha negativa firmada en los desplazamientos al Metropolitano y Mestalla. Los goles desde fuera del área no solo están siendo frecuentes en este inicio de temporada, sino que han dado puntos al Celta.

El provecho que el conjunto vigués le está sacando a los lanzamientos desde fuera del perímetro contrasta con el escaso partido que obtuvo la pasada temporada en este tipo de acciones. Solo 5 de los 43 tantos anotados por el Celta el curso precedente llegaron en disparos de media o larga distancia. El pastel se lo repartieron Iago Aspas, con 3, y Santi Mina y Fran Beltrán, con uno por cabeza. En términos porcentuales, los goles en disparos desde el exterior del área no alcanzaron el 12 por ciento frente al 33 que el equipo lleva en el actual ejercicio.

El primero de la pasada temporada se lo marcó Santi Mina al Cádiz (jornada 4) en un encuentro que el equipo vigués acabó perdiendo por 1-2 en Balaídos. Los celestes ya perdían por 0-2 cuando el vigués acortó distancias.

Bastante más productivo fue el segundo de los goles desde fuera del perímetro, obra de Iago Aspas, contra el Barcelona (jornada 13). El moañés aprovechó una cesión de Javi Galán sobre la línea del área grande para empatar el partido sobre la bocina. En el último segundo del descuento, el Celta lograba neutralizar una desventaja de tres goles al descanso.

Algún tiempo después, en la visita al Sánchez Pizjuán (jornada 22), el delantero moañés anotó, con otro disparo cruzado al borde del área, el primero de los dos tantos que el Celta marcó en el campo de un Sevilla que acabó neutralizando una desventaja de dos tantos (2-2).

La visita a San Mamés registró el único gol del curso de Fran Beltrán con un contundente golpeo desde 25 metros que se coló por la escuadra. Los celestes se impusieron en terreno rojiblanco por 0-2.

El último gol desde el exterior del perímetro se lo marcó, de volea, Iago Aspas al Alavés (jornada 34). El moañés enganchó sin dejar bajar la pelota el rechace de una falta que él mismo había estrellado contras la barrera, estableciendo el 4-0, la mayor goleada del curso en Balaídos.

Aunque de momento solo Aspas y Gabri Veiga han marcado desde fuera el área, el Celta ha incrementado esta temporada su número de lanzadores a distancia con la incorporación de Óscar Rodíguez, un especialista en lanzamientos a balón parado y desde el exterior del perímetro, y el propio Veiga, que el pasado curso anotó un buen número de goles con el filial en este tipo de acciones.

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