Fran Escribá anunció la pasada semana que va a rotar el equipo para gestionar el cansancio del plantel en una semana clave, con desplazamientos consecutivos al RCD Espanyol Stadium y Butarque, en la que el técnico celeste confía en dejar encarrilada la permanencia.

El buen nivel que están mostrando muchos de los jugadores en los entrenamientos se añade a la necesidad de gestionar el cansancio de algunos futbolistas más utilizados a lo largo de la temporada para que el equipo llegue en las mejores condiciones posibles para afrontar la recta final del campeonato, que se cerrará con las visitas del Barcelona y el Rayo Vallecano a Balaídos y un desplazamiento a San Mamés entre ambos partidos.

La baja de Sofiane Boufal, que el pasado sábado vio ante el Girona su quinta amarilla del curso y tendrá que cumplir el correspondiente encuentro de suspensión, condicionará los movimientos que el técnico puede introducir en el frente de ataque.

La baja por lesión de Brais Méndez, en la fase final de recuperación de una lesión muscular, y los problemas que Emre Mor arrastra en su tobillo izquierdo -el turco ayer se entrenó de forma limitada con el grupo- hacen pensar en que el preparador celeste optará por dar la alternativa en ataque a gente como Pione Sisto o Andrew Hjulsager, que formarían en el frente ofensivo junto a Iago Aspas, Maxi Gómez y el franco-argelino Ryad Boudebouz, en línea ascendente tras su buen partido contra el Girona en la banda derecha.

No se descarta que el técnico valenciano opte por dar descanso a Okay o Lobotka, en beneficio de Fran Beltrán. El hecho de que el pivote turco viese en el último partido la novena amarilla y se encuentre (lo mismo que Maxi y David Costas) a una sola amonestación de la suspensión puede condicionar la decisión del técnico.

Las rotaciones, tal como ya ha anticipado el propio Escribá, van a afectar con toda seguridad al centro de la defensa, donde Cabral y Araújo (o uno de ellos) serán reemplazados bien por David Costas, bien por el holandés Wesley Hoedt. Mallo y Olaza parecen seguros en los flancos defensivos, lo mismo que Rubén bajo el travesaño.