Maximiliano Gómez, Maxi, lleva camino de convertirse en uno de los negocios más rentables de la historia del Celta. El club vigués tiene encarrilado el traspaso del delantero centro uruguayo a la emergente liga china por un importe próximo a los 20 millones de euros en una operación que se formalizaría el próximo mes de enero, coincidiendo con la reapertura invernal del mercado.
Aunque el sigilo en torno a la negociación es absoluto en Plaza de España -el club ni confirma ni desmiente que existan negociaciones en marcha-, este diario ha podido averiguar que la operación cuenta con el visto bueno del Celta y del jugador, que cobraría en torno a 4 millones de euros y vería multiplicado por diez su actual salario.
Algunas fuentes precisan incluso que los contratos están ya firmados. Estas mismas fuentes señalan que una delegación del conjunto chino se desplazó hace unos días a la ciudad para ultimar los detalles de la venta, que podría sustanciarse en un monto fijo de dieciséis millones, a los que se sumarían otros cuatro en variables.
La operación podría rondar fácilmente los 16 millones, contando con la cantidad que se llevaría Sporting Club Defensor por el pequeño porcentaje -en torno al 20 por ciento- que el anterior club de Maxi conserva sobre sus derechos, en el supuesto de que se produzca el traspaso a un tercer club durante los cinco años de contrato -hasta junio de 2022- firmados con el Celta por el artillero uruguayo.
Las opciones de Unzué si Maxi se va del Celta
La previsible marcha de Maxi Gómez al fútbol chino pone al Celta en la tesitura de sopesar la necesidad de fichar un sustituto en el mercado de enero, considerando que el punta uruguayo ha sido el principal sostén goleador del equipo en el tramo inicial del campeonato.
La cuestión es que el Celta dispone en su actual plantilla de otros delanteros que pueden ocupar la demarcación de "nueve". Iago Aspas, sin ir más lejos, ha probado un excelente rendimiento en esta posición y el técnico, Juan Carlos Unzué, cuenta también con la opción de John Guidetti, que ha aprovechado la última concentración con la selección de Suecia para expresar su descontento por el escaso protagonismo que está teniendo en el Celta esta temporada. El punta sueco ha llegado a señalar que su situación en las actuales condiciones es "insostenible" y ha deslizado la posibilidad de abandonar el club en el mercado de invierno, cuestión que se supone que aparcará si se va Maxi.
Pensando a más largo plazo, las opciones se incrementan. No hay que olvidar que el Celta tiene cedidos esta temporada a dos delanteros centro que podrían fortalecer su plantel el próximo curso sin necesidad de acudir al mercado: el cantero Borja Iglesias, a préstamo en el Real Zaragoza, y el guadalupeño Claudio Beauvue, cedido al Leganés.
La buena campaña de Iglesias en Segunda División con el conjunto maño, con el que suma ya siete goles y un par de asistencias, invita cuando menos a la reflexión sobre la posibilidad de dar al canterano, de 24 años, la alternativa en el primer equipo la próxima temporada. Antes, sin embargo, tendría que ampliar su contrato, que expira en 2019. Iglesias triunfa actualmente en el Zaragoza, y no parece tener excesiva prisa por renovar. El santiagués no descarta volver, si se le ofrece una oportunidad en el primer equipo, pero ha paralizado hasta final de temporada las repetidas tentativas del Celta para negociar la ampliación de su contrato.
No menos atractiva es la opción de Claudio Beauvue, el fichaje más caro incorporado por el Celta en el mercado de enero. Tras tener un protagonismo residual por causa de una grave lesión en el tendón de Aquiles, el punta antillano está firmando una interesante campaña en Butarque, donde se ha reencontrado con sus mejores sensaciones goleadoras como delantero centro, su posición natural y en la que siempre más ha despuntado. A diferencia de Borja Iglesias, que dentro de poco más de un año será libre para negociar su futuro, Claudio Beauvue tiene contrato con el Celta hasta junio del año 2021.
