Fefiñáns desafía a la lluvia para retrasar su reloj varios siglos

La emblemática plaza cambadesa de Fefiñáns atrasó ayer su reloj varios siglos, realizando un viaje al pasado que no pudo impedir ni la pertinaz lluvia que se cernió sobre la comarca a las tres de la tarde. Ese viaje al pasado estuvo modulado por los actos de la feria medieval Cambados Histórica, que alcanzaba su tercera edición y que sigue en crecimiento y sobre todo, siendo interiorizada por los propios vecinos y establecimientos de Cambados, donde ayer se ofrecían menús medievales devorados por padillas de vecinos vestidos de época.

Uno de los principales atractivos de la feria son los puestos que pueblan la emblemática plaza cambadesa. En total, fueron 33 los que se colocaron ayer y que permanecerán en Fefiñáns durante toda la jornada de hoy. La mayor parte de ellos ofrecían a los visitantes de la feria piezas de artesanía, pero también había otras propuestas, sobre todo de alimentación o de juguetes educativos para niños. Esa actividad comercial de la feria medieval se vio acompañada por las actividades complementarias organizadas por el concejalía dirigida por Tino Cordal. Una de las actividades que más impresión causó entre los asistentes ayer fue la de “A noite en chamas” a la que respetó la lluvia, como tampoco supuso un problema para las que se celebraron por la tarde.

La feria volverá a abrir sus puertas en la jornada de hoy, a partir de las 11.00 con la presencia de los faunos zancudos, música folk y tambores. Por la tarde también se incluirán los espectáculos “Os viaxeiros doutros mundos” y “Suru o elefante guerreiro e o seu séquito”. La clausura tendrá lugar a partir de las 21.30 horas.

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