Los vikingos quieren explotar las aguas termales

Diseñan un plan para habilitar "pozas" y sacar provecho al pozo mineromedicinal de As Lombas

Xoán Castaño ante el pozo de aguas termales de As Lombas.

Xoán Castaño ante el pozo de aguas termales de As Lombas. / FdV

Manuel Méndez

Manuel Méndez

El gobierno de Catoira se dispone a recobrar el esplendor perdido por la localidad en lo que a turismo termal se refiere.

No hay que olvidar que hasta la década de los setenta estuvo abierto el Hotel Balneario Catoira, que junto al Balneario Laxiñas contribuía a la proyección de la localidad, donde las aguas subterráneas también eran aprovechadas para a elaborar jabones y sales de baño, “lo que demuestra que Catoira fue un ejemplo de la importancia del termalismo en Galicia durante la primera mitad del siglo XX, a pesar de tener menor fama que otros balnearios de Galicia”, explican en el ejecutivo vikingo.

No se trata ahora de recuperar de buenas a primeras aquellos balnearios –aunque sin descartar esta opción–, pero sí de poner en marcha una especie de complejo de “pozas” o piscinas termales en el que sacar partido a las aguas mineromedicinales del pozo de As Lombas.

El propio alcalde, Xoán Castaño, visitó la zona para detallar sobre el terreno sus pretensiones, que pasan por dar continuidad “a la puesta en valor del termalismo en las Rías Baixas impulsada por el anterior gobierno de la Diputación con la creación de la Ruta de Villas Termales de la Provincia, que une a los municipios de Caldas de Reis, Catoira, Cuntis, Mondariz-Balneario, O Grove, Ponte Caldelas y Vila de Cruces”.

Época romana

Insiste el regidor en que se trata de “recuperar el esplendor del siglo pasado y valorizar una práctica que se remonta a la época romana, sacar rendimiento a nuestro potencial termal y medicinal para atraer visitantes al municipio”.

Para tal fin, “vamos a contratar un estudio de viabilidad a partir del que crear un posible complejo de pozas y analizar otros métodos de explotación de las aguas que sirvan para dinamizar la actividad económica y turística”, reflexiona.

El alcalde de Catoira ante el pozo de As Lombas.

El alcalde de Catoira ante el pozo de As Lombas. / FdV

Un estudio que, en buena lógica, debe sustentarse en otros ya existentes que garantizan que “tanto el caudal de las aguas de As Lombas como su temperatura son ‘interesantes’ para sacarles rédito”.

Abundando en ello, Xoán Castaño dice estar buscando ideas “para complementar la oferta actual de actividades con planteamientos modernos y avanzados, huyendo del clásico concepto de balneario para personas mayores”.

Colaboración privada

Muy por el contrario, lo que pretenden los nacionalistas es “vincular el aprovechamiento de las aguas mineromedicinales a otras infraestructuras o servicios destinados a visitantes de todas las edades”.

Tal es su interés en este asunto, que el gobierno nacionalistas incluso baraja la opción de establecer líneas de colaboración en esa misma dirección con empresas privadas.

Aguas sulfuradas y sódicas

A principios del siglo pasado se localizó un manantial en Laxiñas, a un kilómetro de As Lombas, que poseía unas aguas sulfuradas y sódicas que fueron declaradas de utilidad pública en 1907 y de propiedades medicinales en 1928.

Aquellas aguas se aprovecharon para la producción de jabones y sales, llegando a funcionar un balneario entre 1958 y 1970.

El caudal actual del manantial de Laxiñas es insuficiente para mantener unas instalaciones termales modernas y parte de sus acuíferos están contaminados. El de As Lombas puede ser la solución.

Y todo “para atraer turismo de calidad”, lo cual requiere de “equipamientos e instalaciones atractivos para todos los públicos”.

Jugando esta baza, Catoira quiere dejar claro que es “una villa termal” y que, como tal, está en disposición de sacar partido a sus recursos subterráneos.

100.000 euros para elaborar el proyecto

Para determinar las posibilidades reales de explotación de las aguas termales de As Lombas, el Concello se dispone a invertir 100.000 euros de fondos europeos correspondientes al Plan de Sosteniblidad Turística en Destino, concedido a Catoira en la convocatoria de “Villas y aguas termales” de 2022 como parte activa del geodestino Mar de Santiago.

Ese dinero se destinará a la elaboración del proyecto con el que se quiere “revitalizar el termalismo en la villa” aprovechando el pozo de As Lombas, “descubierto en 2001 pero sobre el que hasta ahora no se dieron pasos suficientes para su explotación”, lamenta el alcalde, Xoán Castaño, en referencia a su predecesor en el cargo.

18 grados

Habla así de un manantial que, cabe recordar, está situado en terrenos de titularidad municipal anexos al campo de fútbol catoirenses y del que brota agua a una temperatura de unos 18 grados que puede ser buena para dolencias de la piel o el aparato respiratorio.

Esas aguas mineromedicinales se encuentran a más de 130 metros de profundidad y fueron declaradas como mineromedicinales por la Xunta de Galicia en 2013.

Desde 2015 el Concello dispone de la pertinente autorización para su aprovechamiento, tal y como se explicó en aquel momento, siendo alcalde el socialista Alberto García”.

Ya en 2012 el Instituto Geológico y Minero de España (IGME), perteneciente al Ministerio de Economía y Competitividad, había autorizado la declaración de agua mineromedicinal y termal para el líquido existente en el pozo As Lombas.

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