Vilagarcía tendrá un sistema de recogida de la basura más rápido y silencioso

La renovación de los contenedores del servicio de recogida de la basura en Vilagarcía está a punto de comenzar, una vez que la concesionaria, Urbaser, haya recibido los diferentes modelos que sustituirán a los actuales. Así lo anunció ayer el Ayuntamiento, después de que el alcalde, Alberto Varela, y el concejal de Servicios, Lino Mouriño, asistiesen a la presentación de los bidones que se instalarán en el núcleo urbano. El acto incluyó una demostración sobre el sistema de carga lateral de los contenedores.

Los depósitos están fabricados íntegramente en Galicia, y presentas una imagen similar. Están diferenciados por el color de las tapas según el tipo de residuo al que están destinados (amarillo para envases, azul para papel y cartón, marrón para materia orgánica y gris para restos). El sistema de recogida de carga lateral funcionará en las zonas urbanas, ya que en las zonas rurales, con calles más estrechas, se mantendrá el sistema de carga trasera con contenedores de menor tamaño, añade Ravella.

El alcalde avanzó otras novedades, como que los contenedores se distribuirán por todo el municipio en forma de islas, de modo que en un mismo punto se concentrarán los depósitos de los distintos tipos de residuos. Con ello se pretende proporcionar una mayor comodidad al ciudadano, que no tendrá que desplazarse a distintos lugares para depositar los residuos en función de su composición. Otro de los aspectos que ha resaltado el regidor es que con el nuevo contrato de la basura se aprovecha para unificar estéticamente todos los bidones, con la consiguiente reducción del impacto visual.

Junto a los contenedores, también se adquirieron nuevos camiones para recogida, cuatro de gran capacidad y carga lateral, y otros cuatro más pequeños, con carga trasera, para servicio rural. La empresa Urbaser explica que, además de ganar en agilidad, los nuevos camiones son más silenciosos que los antiguos.

Los propios contenedores también contribuyen a la reducción del ruido, ya que las tapas se abren completamente para facilitar el vaciado, lo que no hace necesario agitarlas para que no queden restos en el interior, como ocurría hasta ahora y esto genera más ruido.

En cuanto a los contenedores marrones, serán los últimos en instalarse, después de una campaña de concienciación social.

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