Un millar de "kits digitales" para que los autónomos de Arousa se enfrenten a las grandes cadenas

El llamado “Kit Digital” que ha puesto en marcha el Ministerio de Economía para modernizar los pequeños establecimientos hace furor entre los autónomos de Arousa donde unos 1.200 de las comarcas de O Salnés y Barbanza han solicitado el bono de 2.000 euros o del doble en el supuesto de que cuentan con más de dos trabajadores.

Es un pequeño paso, explica el presidente nacional de UPTA (Unión de Profesionales y Trabajadores Autónomos), el vilagarciano Eduardo Abad quien a su vez reclama un compromiso mayor de instituciones como la Xunta, la Diputación y los Ayuntamientos sobre todo en materia de formación para que estos puedan competir con las grandes cadenas.

Y ello lo plantea en un escenario realmente complicado para el pequeño comercio, hostelería o empresas de servicios como peluquerías que están sufriendo una enorme sangría en los últimos años debido a las amenazas de competitividad.

Abad muestra los alarmantes datos de los últimos diez años que demuestran que se han perdido 1.500 puestos autónomos en la comarca de O Salnés, sobre todo porque aquellos no han sabido o no han podido adaptarse a nuevas fórmulas como la venta online, por poner un ejemplo muy clarificador del panorama económico.

Una situación que Abad califica de muy grave también por el hecho de que la industria sufre un colapso preocupante. Entiende que de aquí a cuatro años sería preciso crear unos 2.500 puestos de trabajo estables en la comarca, lo que implicaría la creación de empresas de gran tamaño y una apuesta decidida de todas las instituciones para que se asienten en los polígonos existentes, todavía vacíos.

Admite el presidente de UPTA que hace unos años se han creado áreas industriales que finalmente se han quedado en “fuegos de lucería” en tanto que no sirvieron como polos de atracción industrial, más bien al contrario “en tanto que han desaparecido conserveras y otras empresas que generaban puestos de trabajo”.

También hace alusión a los numerosos negocios pequeños que han desaparecido como se puede comprobar con un paseo por calles del centro de localidades del tamaño de Vilagarcía, Cambados u O Grove “en las que se ven numerosos escaparates con anuncios de se vende, se alquila, se traspasa o cierre por jubilación”.

La digitalización que ahora se promueve podría ser un primer paso para frenar esta tendencia, explica el líder del colectivo.

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