El yacimiento de Cálago mantiene ocultos sus secretos

No siempre se logran resultados concluyentes en una excavación arqueológica. Eso fue lo que ha ocurrido en un nuevo trabajo acometido por los arqueólogos en el yacimiento de Cálago, donde tan solo se ha conseguido recuperar restos de cerámica, probablemente de origen “castrexo” que todavía tienen que ser analizadas para conocer cual es su importancia. Esos trabajos se concentraron en las inmediaciones de la zona donde aparecieron los restos humanos en las excavaciones realizadas en 2020 y que permitieron datar al primer vilanovés del que existe referencia en el siglo VI.

Sin embargo, la aparición de esos restos es casi un milagro, no solo por que no se hubiesen visto afectados por la acidez habitual del suelo en Galicia, sino también porque se encuentran en una zona muy urbanizada y que, muy probablemente, ha acabado con más restos que pudiesen encontrarse en la zona. De hecho, los restos humanos localizados en una especie de cista de la época altomedieval se encontraban prácticamente bajo un muro de cierre de una vivienda. Los arqueólogos sospechan que la necrópolis probablemente fuese mucho más amplia, pero podría haber desaparecido con las obras de construcción del centro de salud y de varias edificaciones que llevan allí décadas.

Gonzalo Durán, alcalde de Vilanova, destacaba ayer que no haber realizado hallazgos de importancia en esta nueva fase de excavación “no nos arredra de nuestro objetivo, simplemente va a servir para reafirmarnos en continuar buscando nuestro pasado, especialmente el monasterio, pero ahora más en la zona de la croa del antiguo castro”. El regidor recuerda que en la primera excavación que se realizó en Cálago se encontraron objetos de gran importancia y valor histórico, como son tégulas y restos de ánforas romanas. Además, los arqueólogos llegaron a calcular que la zona pudo estar habitada durante más de mil años gracias a los restos y formas de construcciones encontradas. “Queremos estudiar esta zona, afectada por la romanización, y tratar de descubrir su hubiese restos de alguna edificación altomedieval que arroje luz sobre el primigenio monasterio de Cálago”, explicaba Durán antes de afirmar que “estamos convencidos de que el monasterio se asentó sobre el antiguo castro, algo muy común en la Edad Media, y aunque fuese una edificación bastante sencilla, nuestra intención es seguir buscándola para sacarla a la luz, porque es la historia de nuestro municipio”.

Las excavaciones en Cálago, donde se encuentra la torre que es el emblema del municipio, comenzaron en el año 2018 impulsadas por el Concello de Vilanova y amparadas por la Consellería de Cultura. Desde entonces se han ejecutado actuaciones prácticamente todos los años, arrojando siempre hallazgos de relativa importancia.

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