Portos presenta denuncia por lo ocurrido en el muelle de O Xufre

El ente formalizó el escrito en el Puesto de Vilanova y colaborará con la investigación

Un agente de la Guardia Civil inspecciona el interior de la caseta de Portos de Galicia.

Un agente de la Guardia Civil inspecciona el interior de la caseta de Portos de Galicia. / NOE PARGA

A. G.

Un representante de Portos de Galicia presentó ayer denuncia en el Puesto de Vilanova de Arousa por lo ocurrido en el muelle de O Xufre en la mañana del Día de Navidad, cuando unos desconocidos le habrían plantado fuego, supuestamente, a la caseta del vigilante. La denuncia es por daños a un bien público como es la caseta, que quedó totalmente calcinada a causa del fuego. El ente todavía no ha hecho un balance de lo que ha podido suponer el incendio, aunque reconoce que, en principio, no habría cosas de gran valor en el interior de la caseta, más allá de papeleo administrativo gestionado por el vigilante, así como material para su uso.

Mientras, la Guardia Civil mantiene abierta una investigación para tratar de identificar al causante o causantes del incendio, ya que todo apunta a que fue provocado. Las llamas se declararon sobre las 8.00 horas y de ellas alertaron varios marineros que acudían al muelle para achicar agua de sus lanchas después de las intensas lluvias registradas durante la noche. Ellos fueron los que se percataron de la situación y alertaron al 112 de lo que ocurría. El 112 movilizó a los bomberos para extinguir las llamas. Ahora, la investigación se centra en conseguir acceso a las cámaras de vigilancia del muelle para tratar de esclarecer lo que ocurrió y quien puede encontrarse detrás de un incendio que los indicios señalan como provocado.

Estao en el que permanece el portal de acceso al edificio de Os Olmos.

Estao en el que permanece el portal de acceso al edificio de Os Olmos.

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En Cambados, el Día de Navidad también dejó un reguero de incidentes. El más rocambolesco es el de un portal de la calle Os Olmos, que amaneció lleno de excrementos por tercera vez en lo que va de año. Los excrementos fueron arrojados en lugares como el telefonillo, la llave, el suelo o los cristales. Los habitantes del inmueble han optado por dejar abierta la puerta y convivir con el mal olor mientras el personal de limpieza no pase por el lugar a eliminar los restos. La primera vez que ocurrió esta situación se atribuyó a una gamberrada de muy mal gusto, pero las reiteradas repeticiones de los hechos hacen temer a los habitantes del edificio que se pueda deber a una cuestión personal con alguno de los inquilinos. La situación llegó a tal extremo que los vecinos llegaron a plantearse la instalación de cámaras de vídeovigilancia para identificar a los responsables, aunque la propuesta no acabó prosperando. No muy lejos de allí, en la madrugada del Día de Navidad también se denunciaron pinchazos en las ruedas de varios coches que se encontraban estacionados en la calle Os Olmos. Se trata de una circunstancia que también vuelve a repetirse, lo que ha levantado muchas suspicacias e indignación en el vecindario.

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