La Fundación Galega contra o Narcotráfico celebró anoche la decimoctava edición de su gala anual, tras dos años de paréntesis debido a la pandemia. En el acto, celebrado en el Auditorio de Vilagarcía, se entregaron las Nécoras de Ouro y el premio Siso Bartomé. El presidente de la Fundación, Manuel Couceiro Cachaldora, solicitó leyes y procedimientos penales más ágiles, para evitar que algunos narcotraficantes puedan eludir la acción de la Justicia.
En este sentido, Cachaldora manifestó en su discurso que el exceso de garantismo legal ha beneficiado a más de un narco, y ha vuelto a reclamar la creación en Galicia de juzgados especializados en narcotráfico. También demandó más esfuerzos para intervenir el patrimonio de los traficantes, bajo el convencimiento de que si esta herramienta funciona, muchos se lo pensarán dos veces antes de arriesgarse a traficar con drogas.
La gala tuvo una gran carga emotiva, pues dos de las distinciones se otorgaron a título póstumo. Así, la Fundación concedió el premio Siso Bartomé al empresario vilagarciano Agustín Pereira Fernández, fundador de la Empresa Pereira y exalcalde de Vilagarcía, “por su extensa y generosa labor social”. Recogió la distinción su hija, Maísa Pereira. Asimismo, la Fundación otorgó una de sus Nécoras de Ouro a Hermelino Alonso Eiras, histórico director de operaciones de Vigilancia Aduanera, fallecido hace un año.
El ECO y Rial Boubeta
La Fundación concedió sus otras dos Nécoras de Ouro a la unidad de Galicia del Equipo contra el Crimen Organizado (ECO) de la Guardia Civil, y al doctor en Psicología Social Antonio Rial Boubeta.
El ECO, creado en 2006, es una unidad especializada en la lucha contra el narcotráfico, y tiene en su haber operativos que han pasado a la historia reciente de esta actividad delictiva, como la primera aprehensión de un “narcosubmarino” en Europa, en 2019 en la ría de Aldán. Recogió la distinción el coronel Simón Venzal, jefe de la Comandancia de la Guardia Civil de Pontevedra.
Antonio Rial Boubeta, por su parte, recibió la máxima distinción de la Fundación Galega contra o Narcotráfico por sus investigaciones sobre las adicciones en la juventud. Rial lleva tiempo alertando de los daños que provocan en la salud de niños, adolescentes y jóvenes el abuso tanto de sustancias como el alcohol o el cannabis, como del teléfono móvil o de las redes sociales de internet.
Antonio Rial Boubeta ha reclamado en numerosas ocasiones cambios legislativos para proteger a los menores antes la poderosa industria del juego, y ha denunciado que la sanidad pública no está preparada para atender la avalancha de patologías mentales que ya está sufriendo la juventud a consecuencias de las adicciones. Durante su discurso de anoche hizo énfasis en los efectos que el consumo de alcohol puede tener entre los menores. “Tiene unos efectos a nivel cerebral devastadores”.
El acto contó con el acompañamiento musical de la escuela Bernardo del Río, y reunió a destacadas personalidades de la política, la administración de justicia, las fuerzas y cuerpos de Seguridad del Estado y las entidades sociales de apoyo a los drogodependientes.
