La Policía Local de Vilagarcía, obligada a intensificar su presencia en las zonas peatonales de la ciudad, para tratar de acabar con la invasión de las mismas a manos de transportistas profesionales y conductores a título particular, da cuenta de las propuestas de sanción tramitadas contra nueve personas por asuntos relacionados con el consumo de alcohol.
En concreto, según aclaran desde el gobierno local, seis de las denuncias tramitadas ayer mismo por los agentes son fruto de un control de tráfico en el que se detectaron otras tantas alcoholemias.
Sanciones administrativas
Esto genera sanciones administrativas, sin consecuencias penales, ya que los ciudadanos interceptados cuando conducían ebrios arrojaron en las pruebas a las que fueron sometidos resultados por debajo de 0,60 gramos por litro de aire expirado.
Respecto a las otras tres propuestas de sanción, Ravella recalca que corresponden a personas no convivientes “que estaban consumiendo alcohol en la calle y fuera de los horarios permitidos por las normas que regulan las restricciones de la crisis sanitaria provocada por el COVID”.
Esto lleva al ejecutivo de Alberto Varela a realizar “un nuevo llamamiento a la responsabilidad individual y colectiva para rebajar la incidencia del coronavirus”, que hasta el domingo, incluido, se situaba en 208 casos activos, catorce menos que el sábado.
En Ravella apelan a esa colaboración para tratar de “recuperar cuanto antes la normalidad social y económica”. Pero también, pensando de manera muy especial en esos seis conductores que fueron sorprendidos tras haber ingerido alcohol, pide “prudencia y sentido común” para evitar situaciones dramáticas en las carreteras.
Un llamamiento a la colaboración que, volviendo al principio, debe hacerse extensivo a esos conductores que no dudan en invadir las calles y plazas peatonales de la ciudad sin respetar las normas, por lo que, además de contribuir al deterioro del mobiliario urbano, ponen en peligro la vida de los peatones.