Los peatones que ayer atravesaron la céntrica Plaza de Galicia se encontraron ayer con la sorpresa de una exposición efímera compuesta por piezas de hombres, mujeres y hasta un niño, desnudos en tamaño natural. Los vilagarcianos han reconocido en este conjunto escultórico con la alegoría sobre la situación de la pandemia del coronavirus, la mano del polifacético artista local Juan Carlos Platís.
En la nueva propuesta artística hay un cambio ya que sus figuras humanas ahora están desnudas y despojadas del color, lo que permite apreciar aún más el trabajo del modelado y del material.
"En esta etapa de escultura realista, lo que busco es que la gente se enfrente un poco a la realidad de la pandemia. Como artista, estoy muy sensibilizado con todo lo que está sucediendo y lo expreso a través de mis obras", manifestó Platís quien realizó todas estas obras durante el confinamiento. Su mensaje es claro: la sensibilización ciudadana y la necesidad de buscar una solución que garantice el futuro de la humanidad.
Las figuras no pasaron desapercibidas, como pretendía el artista. Muchas personas decidieron fotografiarse con algunas de las esculturas que más les han impactado.
"La respuesta de la gente es espectacular. Muchos se hicieron preguntas, e incluso se acercaron a mi para hablar sobre el significado de las esculturas, sintiéndose identificados con esta expresión, que es lo que yo esperaba".
Para varios de los testigos de esta exposición-sorpresa, las obras deberían estar expuestas más tiempo, ya que ayer por la tarde fueron retiradas por su autor.
Platís no descarta llevar sus obras a otros puntos de la ciudad, e incluso a otros concellos de la comarca, como ya hizo con otras esculturas anteriores, como las mariscadoras, la dedicada a la mujer o la que concienciaba sobre la mendicidad.
Su mayor ilusión es pulsar la opinión de la gente de su pueblo natal, Vilagarcía, aunque reconoce que a veces encuentra más apoyo en otras localidades.
Entre sus proyectos está una exposición más formal de su obra en la sala Rivas Briones, aunque aún no ha confirmado fecha con el departamento de Cultura del Concello de Vilagarcía.
La evolución de Platís como artista pasó del arte abstracto, por la caricatura, la pintura en relieve, la creación de cabezudos y ahora la escultura realista a tamaño natural.
