"Sorprendentemente no tenemos contagios, ni entre los chicos ni tampoco sus familias", respira David Carrera, director del centro de día del Princesa Letizia de Vilagarcía. Para paliar en la medida de lo posible el cierre del centro, él y sus compañeros están en contacto con las familias a través del teléfono. "Les mandamos audios para saber cómo están, qué están haciendo y para no perder el contacto. Además, nuestro experto en comunicación está habilitando conversaciones vía Skype regulares", comenta el director. La idea es que puedan contactar chicos de distintos centros gestionados por la asociación Amencer.

Entre los consejos que Carrera lanza a las familias figura el mantenimiento de los horarios, tanto de sueño como de comida, y levantarlos, ponerlos en la silla. "Les insistimos en que no estamos de vacaciones. Los chicos físicamente están bien, estamos trabajando todos juntos y son unos campeones, estamos muy orgullosos de ellos. Sé de trabajadores que viven con niños pequeños en un piso y están llevando el confinamiento bastante peor", dice Carrera.

Su temor es que el estado de alarma se prolongue demasiado y los niños y adultos del Princesa Letizia estén tanto tiempo sin fisioterapia. "Ese es el problema, que esto pueda empatar con el verano y estén sin fisio de mediados de marzo a septiembre. Esperemos que no", suspira David.

Los usuarios adultos están preocupados por los viajes del Imserso que suelen hacer todos los años en mayo, tanto el grupo más dependiente como el más autónomo. "Van a Sanxenxo y están en la piscina, en la discoteca, ... Es el día que pueden hacer algo así", apunta el responsable del centro de día. Pero ante las preguntas de los más autónomos, él no tiene una respuesta satisfactoria, pues desconoce qué va a ocurrir.