La Xunta encarga a Tragsa los trabajos de gestión y mantenimiento de la depuradora de O Grove

La Consellería de Infraestructuras e Mobilidade publica en el Diario de Galicia de ayer la resolución por la que se formaliza el encargo a la Empresa de Transformación Agraria (Tragsa) de los servicios de explotación, mantenimiento y conservación de la estación depuradora de aguas residuales de O Grove.

El Consello de la Xunta autorizó en el mes de julio la intervención y asunción temporal por Augas de Galicia de la gestión y explotación de esta depuradora a lo largo de un año para garanizar el servicio adecuado de depuración y preservar la calidad de las aguas de la ría de Arousa, una situación que quedaba muy comprometida pues el Ayuntamiento de O Grove renunció a hacerse cargo de esta función a la que se había comprometido.

Explican en la Xunta que se trata de atender las instalaciones "ante el riesgo de contaminación que supone la desatención, por parte del Concello, de sus competencias en el mantenimiento y explotación de la EDAR".

El Ejecutivo autonómico asume así la gestión de esta infraestructura durante los próximos doce meses, con un importe de explotación que asciende a 495.635 euros y que serán repercutidos a la Administración local.

La intervención del servicio, agregan desde la Consellería, puede llegar a su fin "en el supuesto de que el Ayuntamiento asuma su deber en relación con la prestación del servicio de depuración, encargándose de forma efectiva de la gestión y explotación de la EDAR".

Cabe señalar que el ente Augas de Galicia realizó dos requerimientos al Ayuntamiento de O Grove para la gestión de la infraestructura hidráulica que fueron rechazados "por lo que actualmente el preocedimiento se desarrolla por vía judicial".

Fue poco antes del verano cuando el Ayuntamiento de O Grove comunicço que renunciaba a hacerse cargo de la EDAR y argumentó que no reunía las condiciones que se habían comprometido cuando se presentó el proyecto. Cacabelos considera que las instalaciones son insuficientes por lo que se negó a asumir la gestión y mantenimiento de la depuradora, pese a que el Concello cobra la tasa correspondiente.