Durante su vida útil el barco "Platuxa", construido en 1976 y dedicado a la pesca artesanal, especialmente en aguas de Ons, estuvo ligado a Sanxenxo, y más concretamente a Portonovo, donde fue construido. Llegó a O Grove hace ocho años, cuando tenía los días contados, y estuvo a punto de hundirse, debido a su avanzado estado de deterioro. Pero el Concello lo salvó de una muerte segura y lo convirtió en un elemento expositivo más del Museo de la Pesca y la Salazón de Punta Moreiras, donde ahora vuelve a atravesar momentos difíciles.

Esta nave ya forma parte de la historia de O Grove, como lo es de las rías de Arousa y Pontevedra, por lo que requiere de una intervención urgente para volver a ser uno de los elementos más admirados y fotografiados del complejo museístico de Punta Moreiras.

El "Platuxa" fue cedido al Concello, siendo alcalde el socialista José Cacabelos, por la asociación Amigos da Dorna de Portonovo, con la intención de que pasara a formar parte de lo que entonces se conocía como Centro de Interpretación de la Pesca y la Salazón (CIPES).

Fue en marzo, antes de las elecciones, cuando se anunció esta cesión, propiciada por la imposibilidad de que la asociación dedicada a la preservación de las embarcaciones tradicionales pudiera asumir el coste del proyecto con el que se había salvado el "Platuxa" del desguace en 2003.

La asociación de Portonovo abrió en octubre de 2010 un proceso en el que buscaba una entidad que se hiciera cargo del pesquero y propiciara su conservación.

El entonces concejal de Cultura, el nacionalista Antón Mascato, acompañado de Dionisio Pereira, en representación del Colectivo Etnográfico Mascato y asesor científico del espacio museístico de Moreira, se reunían con los responsables de Amigos da Dorna de Portonovo para exponerles su proyecto de preservación del "Platuxa".

Así, se planteó convertirlo en un aula flotante que sirviera de refuerzo y soporte a los contenidos que ofrecía el museo.

El contrato de cesión contemplaba traspasar el 100% de la propiedad del "Platuxa" al Concello de O Grove y los dueños de la nave se reservaban en el mismo documento el derecho a reclamar la titularidad del barco en caso de que el museo pase a ser gestionado y explotado por una empresa privada.

Colectivos como la asociación cultural Piñeiróns, liderada por Celestino Pardellas de Blas, hacían un llamamiento al gobierno de José Cacabelos, que es también quien gobierna en la actualidad, para que no dejara pasar la oportunidad de salvar al "Platuxa" y lo utilizara como elemento de exposición, tratando de dar a conocer la actividad pesquera que se practicaba antaño en las Rías Baixas.

Pero en octubre de aquel año, ya con el gobierno del conservador Miguel Pérez, se supo que lo del aula flotante iba a ser del todo inviable porque la nave estaba a punto de hundirse y de desaparecer para siempre, debido a su deterioro y la gran cantidad de agua que empezaba a acumular en su interior.

Fue así cómo el Concello intervino de urgencia para las tareas de achique y trasladar la nave a un lugar seguro, al resguardo del muelle de abrigo de Porto Meloxo.

Alexandre Aguín, en aquella época concejal conservador de Nuevas Tecnologías, Patrimonio y Documentación, encauzaba la conversión del barco en una de las referencias de aquel espacio museístico de Punta Moreiras que, precisamente, había gestado e impulsado el alcalde Miguel Pérez en su mandato anterior.

El 27 de octubre de 2011, con el conservador otra vez en el gobierno local, el "Platuxa" salía del agua para siempre. Con ayuda de una grúa, era colocado como objeto decorativo a las puertas del complejo museístico.

"Es como si trasladáramos 18 toneladas de cultura marítima tradicional y de patrimonio", esgrimía entonces Alexandre Aguín.

Ya en tierra firma se constató que el casco de aquel barco rebautizado como "Moreiras" estaba muy deteriorado, por lo que se puso en marcha un proceso de limpieza y restauración.

En la actualidad, como queda dicho, vuelve a necesitar una actuación similar. Los agujeros en el casco y el desgaste de su pintura no solo amenazan el futuro de la nave, sino que afean este espacio natural y cultural privilegiado de Punta Moreiras.