Ya se habló en otras ocasiones del Instituto para el Estudio de los Delfines Mulares (BDRI, por sus siglas en inglés), y del importante trabajo que este centro, con puerto base en O Grove, está realizando. Pero ahora que ha llegado el verano, y el buen tiempo, es momento de incidir en ello para destacar las "fantásticas jornadas" que esta entidad está disfrutando para realizar su labor.
Tanto el propio BDRI, dirigido por Bruno Díaz, como sus colaboradores y alumnos, ya que también es un centro de formación, aprovechan al máximo las bondades meteorológicas y oceanográficas para analizar de cerca a los mamíferos marinos y sacar conclusiones que pueden ayudar a entender mejor su comportamiento y a explicar por qué estos animales se reúnen en tan importante cantidad en las aguas arousanas.
A bordo del barco del BDRI es posible observar a los delfines, pero también fotografiarlos, analizar sus aletas -el equivalente a la huella dactilar de las personas- y escuchar los sonidos que emiten mediante modernas tecnologías.
En definitiva, que el BDRI, dedicado a la "investigación y formación en el estudio de la ecología y comportamiento de los cetáceos", está comprobando casi a diario que O Grove es una plataforma inmejorable desde la que seguir a estos mamíferos.
Cabe recordar que el BDRI "ofrece la oportunidad de participar en un proyecto de investigación sobre los delfines mulares (Tursiops truncatus) y otras especies de cetáceos en Galicia", centrando la mayor parte de sus esfuerzos en Arousa.
Una de las actividades que promueve este centro son las "pasantías breves o estancias de ecovoluntariado", las cuales están dedicadas "a todas aquellas personas, sin necesidad de tener nociones previas, que deseen aprender y participar en un proyecto de conservación y estudio de los delfines y ballenas". Para participar en ellas solo es preciso "ser mayor de edad y tener ganas de aprender y vivir una experiencia única estudiando los delfines y ballenas en el océano Atlántico".
