Los vecinos emprenden una nueva cruzada para conservar los bancos de A Compostela

Los vecinos de Vilagarcía no permitirán que se eliminen los bancos de forja del parque de A Compostela. El éxito conseguido por el movimiento ciudadano creado para exigir la reconstrucción de los asientos de azulejo de Ravella parece haber insuflado ánimos a la comisión ciudadana. Tan sólo un día después del inicio de las obras de rehabilitación de la zona verde carrilexa, Juan Carlos Porto, portavoz del foro ciudadano, ha anunciado que exigirán al Concello que respete los elementos históricos existentes en el entorno de la playa de A Compostela.

Pese a que el derribo del chiringuito acometido ayer mismo es visto con buejos ojos por Porto, que calificó el inmueble de "foco de insalubridad", la comisión no ha pasado por alto el valor que podrían tener unos asientos de forja que podrían haber sido realizados en la fragua de Alemparte hace varias décadas. Si bien Porto tiene claro que los asientos de piedra y hierro del parque serán conservados en la remodelación, no ve con tanta seguridad el futuro proyectado para los de madera y forja, que podrían ser cambiados por unos nuevos de hormigón.

Para aclarar estas dudas, así como otras relacionadas con las luminarias, la comisión vecinal quiere reunirse con la nueva concejala de Xestión do Territorio, Tania García a la que pedirán que respete los elementos patrimoniales históricos.

Los planteamientos de la comisión ciudadana son compartidos por el presidente de la asociación de vecinos Santiago de Carril. Miguel Ángel Rodríguez no cree que puedan existir motivos para mantener los bancos de piedra y eliminar los de madera, ya que el estado de la forja es el mismo en ambos casos.

El portavoz carrilexo ha apelado al criterio funcional, sin pasar por alto el nostálgico, para recordar a los responsables de la remodelación de A Compostela que en el entorno de una playa hay que tener en cuenta mucho más que cuestiones estéticas.

Rodríguez Arriero no cree que unos asientos de hormigón sean adecuados para un lugar del que la ciudadanía se beneficia principalmente en verano. El presidente de la asociación de vecinos cree que ese material acumula demasiado calor; por no olvidar que las ranuras de las tablas permiten que las arenas de la playa no se acumulen.