Faro de Vigo

Faro de Vigo

Contenido exclusivo para suscriptores digitales

Los rostros del bosque

En un entorno rodeado de pinos y encinas aparecen unas impresionantes figuras talladas en la roca, algunas de más de seis metros

Los rostros del bosque

Buendía es villa medieval de La Alcarria de Cuenca que encierra todo un viaje al pasado. Además de patrimonio monumental, alberga lugares tan hermosos como el pantano que le da nombre o la Ruta de las Caras, un paraje único lleno de esculturas talladas en la roca.

Rodeadas de naturaleza, a orillas del embalse, van apareciendo las impresionantes figuras. En 1992, Jorge Maldonado y Eulogio Reguillo empezaron a esculpir sus mágicas obras en este bello paraje. La roca caliza arenisca es muy apropiada para la creación artística. Y aquí hallaron el lugar para materializar su sueño hace un cuarto de siglo. Aprovechando los cantiles y grandes piedras que afloraban del pinar se pusieron manos a la obra para tallar un universo influenciado por culturas como la hindú o la precolombina. Son más de una veintena las criaturas del bosque, alguna de más de seis metros de altura.

Es el caso de Krishna y Maitreya, con unas dimensiones de cuatro y seis metros; se tardó en esculpir ocho años por la dureza de la roca, para el Chamán fueron cuatro años: dirige su mirada a la Calavera de metro y medio, desde la cual se puede divisar todo el lugar. Es también una de las caras más fotografiadas.

Esta ruta singular se encuentra en un municipio con mucho que visitar. Buendía fue lugar fronterizo de la Marca Media de Al-Andalus, deseada por árabes y cristianos y sometida a frecuentes incursiones de ambos ejércitos. Estuvo rodeada por murallas y vigilada por una fortaleza del siglo XV, mandada construir por Pedro de Acuña Albornoz. Cinco puertas daban acceso al recinto: la Puerta Calzada, la del Castillo, el Camino del Convento, la de Calle Botica y el Camino de la Isabela. Hoy quedan en pie la Puerta Nueva, la del Castillo y la del Convento, así como los restos de los muros norte y este de la muralla y vestigios del castillo.

Sus calles siguen el trazado medieval, con el Ayuntamiento, iglesia y Plaza Mayor en el centro, de donde parten las arterias más importantes. Precisamente, de entre los lugares con encanto del pueblo, destaca el conjunto iglesia-Plaza Mayor, con curiosa traza de dos plazas unidas entre sí y porticadas. La unión de ambas se establece mediante un pórtico de cuatro vanos y hermanadas en el empedrado del suelo.

En este viaje a La Alcarria no se puede dejar de visitar la capilla de Nuestra Señora de los Desamparados, levantada en los siglos XVI y XVII y ubicada en la Sierra de Enmedio, en las orillas del Río Guadiela.

Compartir el artículo

stats