Un nuevo estudio, liderado por investigadores españoles, constata que reemplazar la carne roja por carne blanca, pescado, legumbres o huevos reduce el riesgo de síndrome metabólico, un conglomerado de factores de riesgo como obesidad abdominal, hipertensión arterial o triglicéridos altos.

Esta es una de las conclusiones de un estudio publicado por el Centro de Investigación Biomédica en Red-Fisiopatología de la Obesidad y la Nutrición (Ciberobn), que lidera este trabajo. Para llevar a cabo esta investigación se analizaron datos de 1.868 participantes de entre 55 y 80 años sin síndrome metabólico al inicio del estudio, pero con alto riesgo cardiovascular.

Según los resultados, los participantes con un consumo elevado de carne, especialmente carne roja y carne roja procesada, presentaron, respectivamente, un 27 % y un 37 % mayor riesgo de padecer síndrome metabólico, en comparación con aquellos con un consumo más bajo. Sin embargo, las personas con un consumo más elevado de carne blanca tenían hasta un 17 % menos de riesgo. La investigación también señala que el hecho de sustituir una ración de carne roja y carne roja procesada por una ración de un alimento alternativo rico en proteínas como la carne blanca, pescado, legumbres y huevos se asocia a un menor riesgo de padecer síndrome metabólico.

El consumo de carnes rojas y procesadas con frecuencia de hasta una a dos raciones a la semana está recomendado y no se asocia a mayor riesgo de síndrome metabólico, sin embargo, su consumo diario desplazaría la inclusión de otros alimentos.