Una operación de la Guardia Civil relacionada con otra de la Policía Nacional han llevado a la detención de 11 personas en Santiago de Compostela, la mayoría sudamericanos y a la desarticulación de dos redes con conexiones en Madrid y Cádiz que vendían drogas en prostíbulos y amañaban matrimonios de conveniencia para legalizar la situación de las prostitutas introducidas ilegalmente en España.

Una operación coordinada por la Guardia Civil de Cádiz en varias provincias españolas se saldaba ayer con 6 arrestos en Compostela y un amplio despliegue policial en la calle Santiago de Chile de la capital gallega, donde se realizaron varios registros domiciliarios, en los que se intervino abundante documentación y 1 kilo de cocaína.

La investigación andaluza se cruzó con otra puesta en marcha por la Policía Nacional, cuyos efectivos detuvieron el pasado fin de semana a otras cinco personas, también en Compostela e interceptaron 250 gramos de cocaína que llegaban en un autobús desde Madrid. Se trata de cinco ciudadanos de origen dominicano acusados de delitos relacionados con el tráfico de drogas, la prostitución y la inmigración clandestina.

Esta investigación se remonta al pasado mes de enero, cuando agentes de la Brigada de Extranjería recibieron información relativa a la posible regularización de extranjeras relacionadas con locales de alterne mediante matrimonios simulados para obtener el permiso de residencia.

En el transcurso de las pesquisas, que coordinan los juzgados de instrucción número 1 y 2 de Santiago, se localizaron locales de ocio en los que se distribuían pequeñas cantidades de droga junto a servicios sexuales. Después se interceptó la cocaína procedente de Madrid.