La mayoría de los pasajeros que viajaban en el Talgo accidentado procedían de Galicia, aunque también había personas que habían subido al tren en la zona de Zamora. Tras el siniestro, todos esperaban pacientes la continuación del trayecto, aunque desconocían las consecuencias del choque, ya que el convoy estaba a cien metros del apeadero, a una distancia prudencial del punto de la colisión. No obstante, muchos pasajeros se asomaban desde las puertas de los vagones en el medio del paraje de Monte la Reina a la espera de seguir el viaje.
"Hemos notado un golpe fuerte y un frenazo", comentaba una de las viajeras, casualmente la actriz Luisa Martín, que volvía a Madrid con otros compañeros de profesión después de representar el día anterior en el Teatro Principal de Ourense la obra "El tiempo y los Conway", en la que también actúa Alejandro Tous. Ellos iban en los últimos vagones, por lo que el impacto lo percibieron menos que los ocupantes de los primeros.
Chapa "por los aires"
Una joven que también viajaba en el Talgo siniestrado en Zamora contó cómo "vi trozos de chapa por los aires, ha sido horrible", expresaba todavía con el susto en el cuerpo. Realmente el golpe tuvo que ser fuerte a juzgar por el estado en el que quedó el coche, especialmente en su parte trasera.
"Lógicamente el tren pegó un frenazo brusco", comentaba poco después del suceso el interventor. Y sobre las circunstancias del accidente, este profesional apeló a la investigación que se ha abierto para aclarar todo, aunque sí señaló que se trataba de un paso con semibarreras automáticas. "Las cámaras lo graban todo, así que no va a quedar ninguna duda de lo que pasó", concluyó sobre las circunstancias de lo ocurrido.
