Mantilla: "Para bajar de peso se necesita hacer ejercicio lo más prolongado posible"

El doctor , que fue presentado ante un auditorio lleno por Ignacio Lojo, jefe del servicio de Angiología yCirugía Vascular en el Hospital Quirón de A Coruña, añadió que "si no se limita la ingesta de azúcar, no va a bajar la grasa, porque está protegida por el azúcar ingerido el día anterior".

En cuanto a los ejercicios más recomendables para quemar grasa, citó varios: "bailar, nadar, caminar, trotar, senderismo, bicicleta, trote ligero... nada de hacer carreras de cien metros lisos, que no nos va a llevar a ningún lado".

El doctor enfatizó en la parte de su charla dedicada al ejercicio, ya que este ocupa un lugar muy importante en el Plan 90, que lleva ese nombre en alusión al número de días que precisa para realizarse y cosechar resultados interesantes en cuanto a una pérdida saludable de kilos, pero sobre todo, para "generar el hábito del ejercicio".

En primer lugar, explicó que el plan está dirigido a personas con un índice de masa corporal (IMC) más de 30 y perímetro abdominal de 102 centímetros en hombres y 88 en mujeres. Antes de comenzar con el programa, estudian la salud cardíaca del enfermo, además de analizar otros parámetros, como la insulina y el porcentaje de tejido muscular, óseo y adiposo (grasa), así como de agua en el cuerpo.

Con todos estos datos, se busca que el ejercicio físico del tratamiento no acabe con un infarto en el paciente. Con el análisis de los resultados de las pruebas, además, se determina cuál sería el ejercicio más idóneo para el paciente.

El doctor Mantilla señaló que los primeros grupos que han puesto en marcha este plan perdieron entre siete y nueve kilos en las primeras semanas. No solo el ejercicio ha contribuido a ello, según explicó, sino que también ha tenido un papel crucial las dietas que calificó de "muy llevaderas" y "coherentes", incluyendo cinco comidas al día.

En cuanto a la confección del plato, señaló que gran parte del mismo debe estar compuesto principalmente por verduras, seguidas de proteínas. La idea es no prohibir ningún alimento a ser posible, pero sí "aminorar las cosas que no son buenas". Así, se pueden ahorrar diariamente más de 500 kilocalorías, lo que se traduce en dos kilos de pérdida semanalmente.

Para ello, volvió a incidir en la necesidad de practicar el ejercicio recomendado entre una hora o una hora y cuarto de lunes a viernes con una caminata generosa en el fin de semana.

Con esas 12 semanas de entrenamiento, se busca como objetivo aumentar el gasto calórico y disminuir el porcentaje de peso graso. Se trata, en global, de adquirir hábitos saludables.

El doctor Ramón Mantilla explicó que todo el tratamiento debe ser multidisciplinar, es decir, debe incluir diferentes áreas de la salud y diferentes profesionales como cardiólogo, fisioterapeuta, entrenador, nutricionista, dietista, endocrino...

El facultativo aprovechó para subrayar los efectos de la obesidad en el cuerpo. Explicó que si siempre estamos acumulando grasas por sobrealimentación, las células de grasa crecen y acaban por inflamarse y romperse. Es entonces cuando sueltan los triglicéridos que se meten en la sangre, generando un número elevado de patologías, entre las que figuran diabetes, hígado graso, cirrosis, hipertensión arterial, problemas mecánicos, obstrucción de vías raspiratorias, fascitis plantar y caderas lesionadas, entre otras dolencias.

Asimismo, subrayó que hay pacientes obesos que no reconocen su enfermedad. Recalcó que esta dolencia requiere un manejo a largo plazo.

También se quejó de que, en general, el entrenamiento médico en obesidad es insuficiente, que faltan programas estatales de salud para atajar esta pandemia del siglo XXI que afecta a todos los continentes y que también hay ausencia de programas educativos en ejercicio y hábitos saludables.

Mantilla reconoció que "tenemos un problema grave en la sociedad que afecta a todos los profesionales médicos. Del 30 al 40% de los pacientes en la consulta de cardiología son obesos".