La campaña "Cada niño un juguete", que repartió las pasadas navidades más de cuatro mil juguetes entre familias con pocas posibilidades del área de Vigo, busca un local en la ciudad para poder poner en marcha la recogida de juegos nuevos y usados que repartirán este año gracias a los voluntarios que ya se han ofrecido para colaborar.

La iniciativa lleva seis años en marcha y en todas las ocasiones logró la ayuda de empresas y particulares que les cedieron un espacio para preparar y repartir los juguetes. "En seis años nunca nos ha apoyado ninguna institución. Lo que le pedimos ahora al Concello, a la Diputación de Pontevedra y a la Xunta es que nos dejen un local grande para poder seguir con la campaña entre octubre y enero. Estamos dispuestos a pagar de nuestro bolsillo los gastos de luz y de agua", asegura Carlos Leiro, directos de la inciativa.