Dejar de fumar, hacer más ejercicio, controlar el estrés y comer sano son los cuatro principales propósitos para el nuevo año. Expertos gallegos en estos ámbitos dan algunas claves para acometer estos retos con éxito. El día después de Reyes, que pone fin a las fiestas navideñas, suele ser la fecha elegida para acometer estos retos.
Elisardo Becoña, catedrático de Psicología de la Universidad de Santiago de Compostela (USC) y responsable de la Unidad de Tabaquismo, asegura que dejar el tabaco es posible y anima a todos los fumadores a intentarlo. Las razones son muchas, aunque el especialista destaca tres: salud, mejor calidad de vida y dinero. En este sentido, recuerda que solo en España el tabaco causa 58.000 muertes prematuras al año -unas 4.000 en Galicia-. "No cabe duda de que el mejor regalo que un fumador puede hacerse a sí mismo y a su familia es dejar de fumar. Vivirá más y mejor, y habrá conseguido derrotar esa dependencia que le tenía preso", dice.
El psicólogo recomienda a quien se haya planteado dejar de fumar que en los días previos descienda el consumo de cigarrillos y que el día marcado para dejarlo intente distraerse con actividades agradables, como disfrutar de sus aficiones o el aire libre, y que busque el apoyo de las personas más cercanas para mantenerse abstinente. "Y sobre todo, no llevar tabaco encima ni tenerlo cerca", dice. Por el contrario, desaconseja tajantemente sustituir el tabaco por los cigarrillos electrónicos. "No son una opción -afirma-. Son más bien un autoengaño que impide dejar de fumar o que hace que si siquiera se lo plantee".
Becoña asegura que dejar de fumar no es tan difícil. "La mitad de los varones españoles han dejado de fumar en los últimos 30 años. Por tanto, se puede si se quiere. Cada año deja de fumar un 2 o 5% del total de fumadores, aunque nuevos jóvenes comienzan a fumar, lo que hace que el descenso sea lento", asevera. Tampoco los intentos fallidos deben disuadir al fumador de volver a intentarlo de nuevo. Todo lo contrario. "Cuantos más intentos, mayor será la probabilidad de éxito final porque sabrá donde ha fracasado antes y lo que tiene que hacer en este nuevo intento", anima.
Llevar una dieta más equilibrada, prescindiendo de la comida rápida, y aumentando el de frutas y verduras, es otro de los grandes retos para el nuevo año. "Una alimentación saludable debe aportar hidratos de carbono, proteínas y grasas, sobre todo insaturadas, además de vitaminas y minerales en proporciones adecuadas para reducir el riesgo de enfermedades cardiovasculares", explica la nutricionista viguesa Amil Viéitez. Además, ayuda a alcanzar y mantener el peso ideal, retrasa el envejecimiento; mejora el rendimiento y previene lesiones durante el ejercicio físico, y refuerza el sistema inmunológico, añade la autora de la Dieta Coherente.
Pero una dieta saludable, matiza, no solo depende de la cantidad de calorías que se ingieren, sino de la frecuencia de su consumo. "Un indicador de dieta equilibrada es realizar 5 comidas principales al día y 2-3 tentempiés", concreta. Otro aspecto importante es no abusar de la sal, el azúcar y los edulcorantes para evitar problemas como hipertensión, obesidad y diabetes. Al mismo tiempo, hay que mantener una correcta hidratación, bebiendo entre un litro y medio y dos litros de agua al día.
Viéitez opina que, en general, consumimos más calorías de las que necesitamos, ingesta que no compensa con el deporte. "Esto lleva a que la incidencia de obesidad sea cada vez mayor tanto en adultos como en niños, además de las enfermedades asociadas, como diabetes, patologías cardiovasculares e hipertensión. Ademas, en España no se hacen bien las cinco comidas al día para mantener en equilibrio la insulina, y consumimos muchas grasas y bollería industrial, y pocas verduras y frutas de temporada", explica. También la comida rápida ha conquistado las mesas, debido a la globalización y a la falta de tiempo, según la nutricionista, que aporta otro tercer motivo: "Tienen un sabor característico por las salsas ricas en azúcar y grasas trans, lo que genera adicción".
Muchos son también quienes se marcan como reto hacer algo de ejercicio. Diversión, salud y forma física son tres de los motivos que animan a los gallegos a practicar alguna actividad física. "El ejercicio no solo aporta beneficios físicos, sino también psicológicos porque aumenta la confianza en uno mismo al tener una imagen física más positiva, disminuyendo la depresión, la ansiedad y el nivel de estrés", explica Madó González, de la Sección de Psicología del Deporte del Colegio Oficial de Psicología de Galicia.
Sin embargo, muchos tiran la toalla antes de apreciar sus beneficios. "Los motivos de abandono están muy bien estudiados: la falta de motivación, el aburrimiento si no se elige bien la actividad, y la percepción de falta de tiempo", argumenta González, para quien cualquier momento del año es bueno para plantearse nuevos objetivos. "Lo importante es que estén bien planteados, que sean realistas", aduce. Por ello, es importante que quien se inicie en la práctica del deporte lo haga de forma gradual, explica, en grupo y de la mano de profesionales. "No sirve de nada empezar muy fuerte y abandonar a las pocas semanas", insiste.
Aparcar el estrés es otro deseo recurrente que no siempre se consigue. Ser realistas con las metas que nos marcamos y no ocultar este estado de ansiedad son dos de las claves para romper con el estrés. "Además de lo que uno pueda hacer por sí mismo, la comunicación con la familia es fundamental. Divulgar y no ocultar lo que está viviendo puede ayudar a que los demás se impliquen y sean un apoyo real", explica la psicóloga Ana Paula Martínez, que recuerda que este problema puede padecerse a cualquier edad, por lo que los niños tampoco están libres de vivir estresados. "Demasiadas actividades escolares o extraescolares, o situaciones como separaciones o crisis familiares pueden provocar estrés en los niños", explica la psicóloga, que advierte de que un estrés prolongado puede acarrear graves problemas de salud, como cardiopatías, hipertensión y depresión.
No hay duda de que dejar a un lado los malos humos, ya sean causados por el tabaco o por el estrés, ejercitar los músculos y cambiar la comida basura por la cocina de la abuela puede ayudar a afrontar este 2016 con más brío.
