Un queso capaz de controlar la hipertensión, gallegas que mejoren la absorción de hierro y un producto lácteo que mejore la absorción de calcio podrían ser una realidad en un futuro cercano y tendrían además sello vigués, ya que en este proyecto trabajan, además del Instituto de Investigación en Ciencias de la Salud, la Universidad de Vigo, el hospital Povisa y varias empresas gallegas del sector de la alimentación. Los productos conocidos como funcionales, inteligentes o biosaludables, es decir, aquellos con cualidades beneficiosas para la salud, no son algo nuevo, aunque a diferencia de los alimentos funcionales comerciales, los tres que se están desarrollando en Vigo estarían avalados por estudios científicos.

Javier de la Fuente, jefe de Medicina Interna de Povisa, lidera los ensayos clínicos, que han comenzado con los relativos al queso ideado para controlar la hipertensión, en el que participan ya veinte personas y que se ampliará en breve hasta llegar a un total de 150 pacientes, hipertensos leves, de este hospital y de otras áreas sanitarias. Los relativos a los otros dos productos comenazarán en el mes de octubre. El objetivo de este ensayo clínico no es otro que constatar que la ingesta de este queso, al que se le ha añadido péptidos -pequeñas proteínas de la leche que tienen distintas propiedades- ayuda efectivamente a regular la hipertensión, una patología que padece la mitad de las personas de entre 50 y 65 años, y que se asocia a un mayor riesgo de sufrir un infarto, un ictus o una trombosis. "Junto con el colesterol, es la principal causa de accidentes cardiovasculares", alerta el médico vigués, que prevé que los resultados del ensayo clínico estén para finales de este año. "Los ensayos durarán tres meses, pero también tenemos que evaluar después si tras dejar de tomar el producto, se van o no sus efectos", explica.

A pesar de su larga experiencia en ensayos clínicos, esta es la primera vez que Povisa realiza uno para validad un producto alimenticio. "Muy pocos hospitales tienen la posibilidad de colaborar en un estudio así con la industria alimentaria", reconoce el médico, que añade que este primer proyecto conjunto, denominado "Envellefun", ha sido seleccionado entre cientos de propuestas procedentes de toda España para ser financiado con fondos Feder de la Unión Europea. Dos empresas alimentarias gallegas participan en este proyecto, la de lácteos Innolact y la de galletas Biscuits Galicia. "Es importante resaltar que si este estudio es posible también es gracias a estas empresas innovadoras", opina el médico.