La amenaza de la aparición de nuevas enfermedades -algunas capaces de convertirse en epidemias- es constante, como lo demuestra el surgimiento de un tipo desconocido de coronavirus y de la gripe aviar H7N9 entre humanos, alertó ayer la Organización Mundial de la Salud (OMS).

Así lo subrayó la directora general de la OMS, Margaret Chan, al inaugurar la Asamblea Mundial de la Salud, un foro que durante una semana reúne en Ginebra a altos representantes de sus 192 países miembros para adoptar importantes decisiones en el área de la sanidad.

El primer caso humano del H7N9, un tipo de gripe propio de las aves, se detectó en China a finales de marzo y en tres semanas se registraron más de cien casos, una tendencia que se invirtió tras el cierre de mercados de aves vivas en ese país. No obstante, Chan negó que la situación está bajo control, pues los virus de la gripe tienden a "reinventarse constantemente".