La resolución esta semana de las primeras subvenciones del año al audiovisual gallego por parte de la Axencia Galega de Industrias Culturais (Agadic) –dependiente de la Xunta de Galicia– ha supuesto un balón de oxígeno para las productoras beneficiarias. No obstante, las pymes que han quedado fuera de las ayudas han dado la voz de alerta (refrendada también por el resto del sector) sobre la situación de un audiovisual que vive el peor año de su historia. Desde el Cluster do Audiovisual Galego, su vicepresidente, Pancho Casal, afirma que la situación es "muy grave" y que resulta "una epopeya" llevar adelante ciertos proyectos como los largometrajes.

Preguntado si se trata del coletazo de la crisis general, Casal afirma que sí pero añade que la grave situación se debe también a los "meses perdidos por el cambio del gobierno en la Xunta. Los que marcharon no quisieron dejar aprobados los proyectos y los que llegaron tardaron en ponerse al día. No se le da importancia a que se lleva cinco meses sin resolver problemas afectando a 2.000 personas de las productoras gallegas, lo que nos ha situado en una situación más delicada".

El vicepresidente del Cluster añade que "este ha sido un año durísimo por los últimos cinco meses de incertidumbre a la espera de las ayudas, lo que nos dejó sin posibilidad de desarrollar negocios a nivel interno".

En el caso de Continental, la productora de Pancho Casal, dos semanas atrás fue convocado el consejo de administración para "reorientar" el negocio ante la caída dramática de los proyectos en la producción de publicidad. Con el nuevo plan estratégico, Continental pasará a trabajar más en la línea de animación así como en los videojuegos –aupada en esta última por la licencia con Nintendo para los juegos de la Wii–. La producción de largometrajes de ficción, sin embargo, quedará más bien estancada.

Agadic sólo ha concedido una subvención a Continental para la tv-movie "Eduardo Barreiros. O Henry Ford galego", que recordará a uno de los impulsores de la automoción española. En un capítulo de 90 minutos, se contará la vida de este industrial ourensano a partir del momento en el que sopesa si vender su empresa a la norteamericana Chrysler.

Peor suerte han tenido en Xamalú Films quienes sólo habían presentado ante Agadic un proyecto para un largometraje que "no ha salido adelante al no haber recibido la subvención", explica Xavier Bermúdez, responsable de la firma audiovisual, quien mantiene su esperanza en el documental "Memorias rotas" de Manel Rodríguez, que sí recibió una ayuda autonómica el pasado año y que estará finalizado al acabar el verano.

Bermúdez coincide con las voces que denuncian la "incertidumbre" del sector audiovisual gallego por el "retraso" de las subvenciones de este año.

Quien se declara con "las manos atadas" es la responsable máxima de Milou Films, Elisa Saldaña. "Íbamos a rodar este año. Teníamos toda la financiación cubierta excepto la parte correspondiente a la Xunta. Al no recibir la ayuda, en principio, estaremos parados este año, lo que es muy preocupante", explica.

Saldaña añade que muchas de las pymes gallegas dedicadas al audiovisual se encuentran en la cuerda floja tras quedarse sin la subvención de la Xunta. "Creo que las ayudas están mal repartidas", opina. En la presente convocatoria, se han subvencionado once largos (de ficción, animación, telefilmes, de difusión cultural y creación digital). Desde Milou Films consideran que se podría haber facilitado menos cuantías pero a más beneficiarios para mejorar la salud económica de las pymes del sector y, por tanto, crear empleo.

Como soluciones, las productoras apuntan un mayor apoyo por parte de la TVG para desarrollar proyectos y la ampliación de una línea del Igape que adelante dinero para las iniciativas antes de que las televisiones realicen los pagos.