El recital será el primer acto organizado por el Ramon Llull en la capital británica desde su inauguración y posteriormente habrá una recepción a representantes del mundo cultural y político del Reino Unido, con la presencia de la viceconsellera de Asuntos Exteriores y Cooperación de la Generalitat, Roser Clavell, y de la directora adjunta del Institut Ramon Llull, Neus Fornells.
El programa del recital incluye piezas como la canción tradicional bretona Gwerz o la israelí Noumi, así como temas populares catalanes y del barroco español.
Ferran Savall cantará e interpretará a la teorba (instrumento de cuerda de finales del siglo XVI) sus propias versiones de "La cançó del lladre" (La canción del ladrón) y "Mireu el nostre mar" (Mirad nuestro mar), con texto de Manuel Forcano.
En declaraciones a Efe antes del concierto, los Savall expresaron la "extrañeza" que les produce pasar el día de Sant Jordi fuera de Barcelona, en un día tan especial en Cataluña.
"Hace muchos años que no hago un concierto en este día, porque siempre me lo guardo para estar en Barcelona. Es un día en el que me gusta ir a las librerías de antiguo e impregnarme del ambiente extraordinario de la ciudad", dijo el violagambista.
La misma sensación tiene Ferran, que también se declara un apasionado de la Diada de Sant Jordi, porque "es un día en que los lazos entre la gente, las amistades y los amores, salen afuera"
"Se palpan en el aire y en la calle las muestras de cariño y de amor. Vivirlo en Barcelona es precioso", afirmó.
Savall padre destacó la tarea del Institut Ramon Llull como institución, que ayuda a comprender que "la lengua representa la esencia de un pueblo", que la lengua "es algo que se tiene que respetar siempre, como una obra de arte".
"Igual que la importancia de una canción no depende del número de músicos que la tocan, una simple voz puede emocionarte tanto como una orquesta sinfónica", afirmó.
"Una lengua, aunque la hablen unos pocos, merece respeto porque es el vehículo de un pueblo y de su tradición. Es demasiado sagrada y no debemos caer en la trampa de utilizarla como medio político", añadió el músico catalán.
El patrón de Inglaterra es también San Jorge, una jornada que no es festiva oficialmente y que los ciudadanos de este país sólo han empezado a celebrar y a recordar en los últimos años como un elemento de conmemoración conjunta de la tradición inglesa.
En contraste, sí lo celebran los escoceses, galeses e irlandeses.
