Durante más de un año el río Lérez ha permanecido bajo vigilancia por prealerta de sequía, e incluso entre noviembre de 2017 y marzo pasado el nivel llegó a alerta por el bajo nivel de precipitaciones de todo el año anterior. Esa situación acaba de anularse. La Oficina Técnica da Seca propuso ayer volver a la "situación de normalidad" en la totalidad de la Demarcación Hidrográfica Galicia-Costa, que incluye a la cuenca del Lérez, una vez constatada la recuperación del caudal base de los ríos en los 19 sistemas que integran la cuenca.
Han sido necesarios más de 900 litros de lluvia por metro cuadrado en poco más de tres meses -desde el 1 de enero hasta ayer- para constatar que el fantasma de la sequía que amenazó en buena parte de 2017 a toda la población ya ha desaparecido, al menos de momento. Y es que la lluvia que se acumula este año supera con creces la media de recientes inviernos, otoños y primaveras. Si en todo 2017 re recogieron en la estación de Meteogalicia de Campolongo alrededor de 1.090 litros (a una media de tres al día), en apenas 96 días de 2016 ya se superan los 900 litros, lo que supone que cada jornada de este año cayeron cerca de diez litros, más del triple.
En enero ya se recogieron 213 litros, por 162 en febrero y 408 en marzo. En estos seis primeros días de abril ya se pasa de los cien litros. Y es que de los 96 días transcurridos de este año, hubo precipitaciones, en mayor o menor medida, en 65 de ellos, algunos con acumulaciones abundantes debido a las constantes borrascas de las últimas semanas.
Embalses
La notable mejora en los ríos también tiene su reflejo en los embalses. Los 19 integrados en Galicia Costa se sitúan en un 91% de ocupación -frente al 73% de hace un año- mientras que el del Pontillón acumula ya varias semanas al 100%, al igual que el de Eiras, destino del proyecto de trasvase desde el río Verdugo, en Ponte Caldelas, que ideó Augas de Galicia para abastecer a Vigo y a su comarca. Abandonada la vía de la emergencia, este iniciativa se tramita ahora por la vía ordinaria, pero desde la polémica de meses atrás al respecto no volvió a conocerse ningún avance público.
El embalse del Umia, por su parte, ronda el 73% de ocupación, cuando hace un año no llegaba al 60%.
La decisión de ayer de recuperar la normalidad en el Lérez y demás ríos gallegos responde a "que las precipitaciones registradas a lo largo de febrero y marzo fueron superiores a lo habitual en esta época del año, lo que permitió encadenar cuatro meses con lluvias por encima del promedio", según Augas de Galicia. "La continuidad en las precipitaciones unida al hecho de que han tenido cierta intensidad y persistencia en el tiempo, añadió, permitieron consolidar una tendencia de recuperación en el recargo del medio hídrico que fue clave a la hora de que los técnicos hayan tomado la determinación de volver a la normalidad", añade.
