Durante muchos, muchos años, cuando alguien mentaba a secas el nombre de Sabino en Madrid, villa y corte del rey Juan Carlos I, todo el mundo sobreentendía que estaba hablando de Sabino Fernández Campo, primero secretario general y luego jefe de la Casa del Rey.

A otra escala mucho más pequeña, pero no menos digna, cuando en el barrio de A Moureira, desde el puente de O Burgo hasta As Corbaceiras, alguien pronuncia el nombre de Sabino, todo el mundo sabe también que el interlocutor se refiere a Sabino Martínez Fontán, memoria histórica y principal guardián de aquel emblemático lugar. Eso ocurre también desde hace muchos, muchos años; sobre todo, desde que Panderetas -el sobrenombre de la saga familiar que heredó de su antepasado- puso en pie la Asociación de Vecinos de San Roque, colectivo encomiable que celebró sus bodas de plata en 2017.

Nuestro Sabino acaba de renovar, una vez más, su compromiso como presidente de la mencionada asociación, porque nadie se atreve siquiera a discutir su enorme autoridad moral con una candidatura alternativa. Y es que si no existiera Sabino, habría que inventarlo. Desde luego, el barrio de A Moureira y San Roque muy particularmente, no serían lo mismo sin todos sus esfuerzos, cuidados y desvelos, en favor de una mejor calidad de vida en general para todo el vecindario. La actividad que desarrolla la asociación, tanto en el ámbito cultural, como recreativo y social, tiene un mérito enorme, y destaca especialmente por su talante abierto y nada sectario, con el mejor espíritu de la gente que vive cerca del mar.

Sabino Martínez Fontán es uno de los escasos pepitos grillos que nunca ha hincado su rodilla ante el gobierno municipal del BNG. Por ese motivo, Fernández Lores no puede verlo ni en pintura. Panderetas es uno de esos pontevedreses a los que el alcalde y su guardia de corps, ni reciben ni escuchan en el Ayuntamiento. Sabino ha denunciado esa actitud intransigente unas cuantas veces sin ningún resultado.

El meollo de la cuestión está en adivinar quien tomará algún día el relevo de Sabino Martínez Fontán al frente de la Asociación de Vecinos de San Roque cuando falte o ya no pueda más, y vislumbrar si este colectivo mantendrá su buen hacer en su modestia, contra viento y marea.